La medida dispuesta por una resolución de la Comisión Nacional de Valores (CNV) pretende adecuarse a los desafíos regulatorios que imponen las nuevas tecnologías para la provisión de productos financieros en el mercado de capitales, además de promover el desarrollo e innovación en el sector.
Por Martín Schneider * / Especial para EL DIARIO
En los últimos años, fueron reiteradas las alertas de organismos multilaterales y autoridades locales respecto de los riesgos de las criptomonedas. Un acuerdo firmado el año pasado por el gobierno argentino con el FMI establece que se desalentaría el uso de criptomonedas en prevención del lavado de dinero y la informalidad de la economía. En igual sentido, tanto el Banco Central de la República Argentina (BCRA) como la Comisión Nacional de Valores (CNV) advirtieron sobre los riesgos de los criptoactivos por su elevada volatilidad y la ausencia de protecciones para los usuarios de acuerdo a la regulación vigente.
Por otra parte, la misma CNV autorizó recientemente el reglamento de contratos de futuros sobre el Índice Bitcoin Matba Rofex, con negociación y liquidación en pesos argentinos y sin entrega del activo subyacente, lo cual permite estar expuestos a las variaciones de precio de bitcoin sin la propiedad del activo.
Este producto financiero se encontraba desarrollando en el ámbito del Hub de Innovación de la CNV desde octubre del año 2021 por la empresa Matba Rofex (una fusión de los Mercado a Término de Buenos Aires y el Mercado a Término de Rosario). Este índice se calcula a partir de las cotizaciones ofrecidas por 10 plataformas de intercambio locales y de acuerdo a la normativa, estaría limitado a “inversores calificados” como pueden ser Fondos Comunes de Inversión, Fideicomisos, Financieras, Aseguradoras, Gobiernos y Organismos Estatales, e individuos con inversiones bursátiles por 78 millones de pesos. Todas estas condiciones implicarían poder operar la criptomoneda en un mercado regulado, algo que no se había logrado hasta el momento en el ámbito local.
De esta forma, nuestro país integraría la escueta nómina de países en el mundo que ofrecen este tipo de instrumentos financieros en sus mercados de valores, como son Estados Unidos, España, Canadá y Hong Kong.
En este marco resulta dable destacar que, de acuerdo al último informe de la empresa Chainalysis -una plataforma de datos de blockchain que brinda servicios de investigación a agencias gubernamentales, instituciones financieras e intercambios centralizados-, Argentina se ubica entre los 20° principales países del mundo y 2° en la región –detrás de Brasil– con mayor adopción de monedas digitales, esto ponderando diversos elementos tales como el poder adquisitivo per cápita, importes de las transferencias, cantidad de operaciones y números de usuarios de internet.
Así podría concluirse que, a pesar de las advertencias y constantes turbulencias que caracterizan a este sector, el interés en las criptomonedas por parte de inversores institucionales continúa en aumento y el mercado financiero comenzaría a dar respuesta a tal demanda por sobre toda coyuntura en la cotización del precio; convirtiéndose -tanto para empresas como personas- en una alternativa de inversión y herramienta que permite dolarizarse sin restricciones, particularmente en un país atravesado por una constante devaluación de su moneda local e inflación creciente.
(*) Martin Schneider es Contador Público (MP. 4138 CPCEER), Diplomado en Criptoeconomía y Master en Blockchain. Desde 2016 participa activamente del ecosistema que promueve la economía digital en nuestro país, además de ser emprendedor tecnológico se desempeña como capacitador, conferencista y consultor en proyectos referentes a Blockchain y Activos Digitales; Co-Fundador y CEO de Blockapital.