Alessandro Bolzan es hijo del ex futbolista entrerriano Rubén Darío Bolzan y es considerado la “nueva joya del fútbol italiano”. Con 18 años, actualmente juega en el equipo U-19 de la AS Roma y es una pieza fija del seleccionado juvenil de Italia.
KEVIN RIVERO / [email protected]
Rubén Darío Bolzan deambulaba por diferentes equipos del ascenso italiano cuando, en 2005, en la ciudad de Montevarchi, nació su hijo Alessandro. Se crió en el medio de la cultura futbolera y dio sus primeros pasos casi al mismo tiempo que daba los primeros toques sutiles con su pie derecho al cuero de su pelota.
Mientras transitaba su infancia, Alessandro se sumó a las categorías de la AS Roma. Comenzó jugando con el balón sin presión e involucrándose con otros chicos de su edad, mientras su entusiasmo por el deporte del balompié fue en aumento.
Realizó todo el trayecto el juvenil en las divisiones inferiores del elenco capitalino y adquirió los principios, los valores y la grandeza de una de las instituciones más importantes del mundo. Desarrolló sus dotes de centrodelantero y extremo, y empezó a distinguirse por su capacidad para atacar a los espacios, por sus movimientos para capitalizar acciones de frente o de espalda, por resolver de primera o buscar el momento ideal, por la soltura para encarar a sus rivales y el atrevimiento para explotar su pegada a larga distancia. Ostenta características de players de talla mundial, con el orden y la disciplina del fútbol europeo, pero también con la picardía de sus raíces argentinas.
El crecimiento de Bolzan fue vertiginoso y de inmediato acaparó la atención del mercado futbolístico italiano y también del europeo. Roma no dudó en ficharlo y, en 2021, con 16 años, realizó su primer contrato profesional en la institución. En esa ocasión, a través de sus redes sociales, el italo-argentino expresó: “Estoy feliz y satisfecho de haber alcanzado mi primer pequeño hito, después de mucho trabajo y dedicación ha llegado mi primer contrato profesional. Agradezco a Roma por su confianza y estima en mí, mi familia por estar siempre a mi lado y mis amigos. ¡Esto ni siquiera es el principio!”, expresó en diálogo con Bien!.
Su ingreso al deporte profesional hizo ruido; sin embargo, cumplió con las expectativas. Salió a la escena y, lejos de intimidarlo, las primeras luces del espectáculo lo potenciaron. Siguió rompiendo redes con la indumentaria romana y las chances en el seleccionado italiano fueron al alcance de su mano.
En la temporada 2021/2022, el delantero pagó las cuentas con buenas actuaciones y fue de utilidad en los equipos de menores de 17 y de 18 años. En el elenco Sub-17 pisó el césped en 21 oportunidades y se destacó con 13 goles; mientras que en el U-18 estampó su sello en la red una vez en siete encuentros jugadores.
Tras un año competitivo con estadísticas sobresalientes, el atacante integró la Selección de Italia que compitió en la Eurocopa U-17 2022, desarrollada en Israel. Fue una pieza indiscutible en el ataque Azzurri . Bolzan intervino en los tres cotejos de la fase de grupos (anotó en la derrota 3-2 frente a Alemania) y fue parte de la caída en los cuartos de final frente a Países Bajos (2-1), que posteriormente culminó como subcampeón del certamen
Envalentonado por su protagonismo en los diferentes torneos domésticos e internacionales, el joven italiano continúa plasmando una evolución notable. En la actual temporada se asentó definitivamente en la división sub-18 convirtiendo 13 goles en 18 partidos, y empezó a mostrar sus armas en el Under-19 .
Muchos medios europeos se animan a calificarlo como la “nueva joya del fútbol italiano” y en Argentina sonó su nombre por estar incluido entre los “Euro-pibes” [NDR: se denomina de esta manera a los juveniles que nacieron en Europa pero tienen descendencia argentina] que sigue desde cerca del scouting de la Asociación del Fútbol Argentina (AFA). Aunque parece que su corazón se colorea completamente de azul, todavía permanece una puerta abierta para calzarse la albiceleste.
Bolzán sueña en grande desde chico, cuando comenzó a proyectar una vida en el deporte. Y más allá de aún atravesar un momento de plena madurez, exhibe una clase que en el futuro puede posicionarlo en la cima del fútbol mundial.
DATOS
Alessandro Bolzán nació el 24 de febrero de 2005 en Montevarchi, una localidad perteneciente a la provincia de Arezzo. Sus padres son argentinos que emigraron al territorio italiano a finales de la década del ’90.
Al cierre de esta edición, con 18 años, el italo-argentino registra números muy interesantes. Con la vestimenta de la Roma, en la categoría sub-17 convirtió 13 goles y brindó una asistencia en 21 partidos jugados; en la categoría sub-18 concretó 14 anotaciones y una asistencia en 21 encuentros disputados; en tanto que en la categoría sub-19 intervino en dos ocasiones, pero todavía no pudo escribir su nombre en la tabla de goleadores.
En los seleccionados italianos sucede algo similar y ostenta marcas dignas de admirar. En el representativo U-17 concluyó con un saldo de 12 tantos en 19 juegos (ocho marcados en encuentros amistosos, tres en la etapa clasificatoria a la Euro de la categoría y uno en la Euro U-17 2022); mientras que en el combinado U-18 ya ha jugado siete compromisos amistosos y marcó en una ocasión.
LA CARRERA DE RUBÉN, EL PADRE DE ALESSANDRO
Rubén Darío Bolzan nació en la localidad de Nogoyá en 1975 y debutó profesionalmente en la segunda división del fútbol argentino vistiendo la camiseta del Club Atlético San Miguel (Buenos Aires). Allí jugó entre 1997 y 1999.
Tras esa experiencia, el entrerriano buscó un crecimiento deportivo y personal, y se mudó a Italia, dónde realizó el resto de su carrera en las categorías de ascenso. En el territorio italiano se desempeñó en Lucchese, Montevarchi, Castellettese, Nardò, FC Matera, Città di Castello, Real Montecchio, Morro d´Oro, L´Aquila, FC Fossombrone, Civitanovese, Fermana FC, Recanatese y Folgore Falerone.
Después llevó adelante su etapa como entrenador y asistente técnico.
UNA FAMILIA VINCULADA AL FÚTBOL
Además de su padre, Alessandro también cuenta con un tío que se desempeñó en el fútbol profesional. Marcos, hermano de Rubén, debutó y jugó varias temporadas en Unión de Santa Fe (desde el 2001 al 2006) y posteriormente tuvo un paso por San Martín de San Juan (2007). Luego, emigró a Europa y continuó su carrera deportiva en el ascenso italiano.
“Agradezco a Roma por su confianza y estima en mí, mi familia por estar siempre a mi lado y mis amigos”