Patronato comenzó a perder en el momento del cambio de localía.
El partido el Santo lo comenzó a perder en el momento del cambio de localía. Ayer tuvo buenas intenciones, manejó el partido, pero las que generó no las convirtió. Olimpia efectivo se llevó los tres puntos y acaricia la clasificación. Jesús Valenzuela de Venezuela fue el árbitro.
Juan Manuel López / [email protected]
En la cancha Patronato compitió de igual a igual, pero el partido lo comenzó perdiendo en el momento que la organización decidió trasladar el partido a la vecina provincia.
Ayer, más allá del apoyo de la gente, el equipo de Walter Otta no tuvo eficacia y las que tuvo las desperdició.
El partido entre Patrón y Olimpia se disputó ayer por la noche en Santa Fe, en el estadio Brigadier Estanislao López de Colón de Santa Fe y fue válido por la cuarta fecha del Grupo H de la CONMEBOL Libertadores. El juego contó con el arbitraje del venezolano Jesús Valenzuela Sáenz.
GOLPEÓ LA VISITA. Patronato arrancó mejor el partido, con Barinaga y Valdez Chamorro como manija, bien activos. El Santo se plantó en campo rival y no pudo convertir en las dos chances que tuvo en el amanecer del partido. Levato primero y luego Valdéz Chamorro. Olimpia contestó con una contra letal antes de los 10´ y la cuestión se puso cuesta arriba. Un desborde por derecha a las espaldas de Cobos terminó con centro atrás y gol de Torres para el equipo paraguayo que se ponía en ventaja temprano. La defensa no cerró bien y el jugador que ingresó al área apareció vació, ante el esfuerzo de Ruiz Díaz que no llegó.
El equipo de Paraná perdía 1 a 0 y la obligación era más grande. Había que remontar el partido y esa fue la intención rápidamente. Patrón no aflojó y siguió yendo al campo rival. Asi generó un par de chances claras. En 15´ el Negro era mejor y no podía.
SIN PROFUNDIDAD. El segundo cuarto de hora fue todo de Patrón. Actitud y fútbol tuvo el equipo de calle Grella para pararse a jugar en campo rival y recuperar el balón rápido. Le faltó precisión en los metros finales para poder ponerse en tablas en el resultado.
CHANCES PARA EL RIVAL. Olimpia se cerró bien atrás el tramo final. Patrón comenzó a sentir el desgaste, no fue con las mismas fuerzas y de contragolpe le quedaron las mejores chances al rival. Fernández y Cardozo pudieron estirar la ventaja, pero no tuvieron puntería.
ADENTRO ARCE. Barinaga, de buen primer tiempo dejó la cancha para que ingrese Damián Arce para ser el conductor del equipo. El Santo como en la primera mitad, se plantó en el campo adversario, con ganas, intentando abrir la cancha. Era todo de Patrón.
Con el correr de los minutos el partido no variaba. El Rojinegro con la iniciativa, el tricampeón sudamericano agazapado, esperando un contragolpe.
TODO PARA GANAR. Otta metió piernas frescas, jugadores más ofensivos, pero los cambios no entraron bien. Salvo el pibe Agustín Ramos, que hizo su debut en la primera rojinegra en un partido tan significativo y estuvo a la altura de las circunstancias.
Patrón fue más siempre que el rival, pero no tuvo poder de fuego y pasada la media hora llegó la peor noticia.
LIQUIDADO. En ofensiva el Negro volvió a elegir mal. Olimpia respondió de contragolpe y liquidó la historia. Salvá contuvo un remate cruzado, pero el rebote cayó hacía el medio del área chica, donde Torres ingresó solo para clavar el balón en el fondo de la red. En 30´ del complemento el partido, ya no fue más partido.
Olimpia cedió todo tipo de intención de tener la pelota, esperó bien cerrado atrás y cuando pudo hizo tiempo.
En Patringa pesaban las piernas, el esfuerzo y la cabeza habían hecho estragos. Fue otro partido digno, pero la diferencia de jerarquía terminó inclinando la cancha para el elenco paraguayo. Ahora quedan dos juegos como visitantes y la chance de poder meterse en la Copa Sudamericana, aunque las matemáticas digan otra cosa.
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