La historia dirá que, en el segundo semestre de 2023, se construyó en el Parque Industrial de Paraná, una planta generadora de energía fotovoltaica que, aprovechando las bondades del sol, permitirá abastecer hasta de un 20% del actual consumo de las fábricas que funcionan en el predio. El proceso está avanzado. En la siguiente nota, los detalles
Mezclada entre otras novedades, puede que haya pasado desapercibida incluso para los lectores más atentos la noticia de que se está resolviendo quién de los tres interesados construirá un parque solar fotovoltaico en el Parque Industrial. La instalación ocupará la mitad de las 20 hectáreas incorporadas el año pasado al Parque Industrial.
El proyecto contempla el montaje de estructuras, los paneles que captarán la energía solar, el cerco perimetral, la oficina de monitoreo y una serie de elementos auxiliares necesarios para la generación de energía fotovoltaica. El plazo de ejecución de los trabajos fue estimado en 180 días corridos, por lo que desde principios del próximo año este parque estaría operativo.
“Damos un paso importantísimo para Paraná y para toda la provincia”, dijo el intendente Adán Bahl, no sin remarcar que “será el primer parque fotovoltaico a gran escala de Entre Ríos”. Luego señaló que se trata de “una decisión que ubica a la ciudad como pionera en la producción de energía limpia y que busca cumplir con la Ley Provincial 10933, sancionada en 2021 por iniciativa de nuestro gobernador Gustavo Bordet, con el objetivo de que el 30% de la energía consumida en Entre Ríos sea renovable para el 2030”.
El parque fotovoltaico de Paraná tendrá 10.000 paneles y generará unos 18 GWh/año de energía, que se va a integrar a la estación transformadora existente y que se distribuirá entre el consumo industrial y hogareño.
De primera mano
Para conocer detalles de la propuesta, EL DIARIO entrevistó al subsecretario de Coordinación Operativa de Presidencia de la Municipalidad de Paraná, Julián Hirschfeld. Lo que sigue son los tramos más significativos de la charla mantenida.
–¿Cómo surge el proyecto de instalar un parque solar?
–Primero, por la visión estratégica del intendente Adán Bahl de gestionar proyectos innovadores que potencien a la ciudad y posicionen a Paraná como una de las principales capitales del país.
A su vez, en noviembre del 2021, se promulgó en la provincia la Ley 10.933 de fomento a energías renovables, cuyo espíritu pretende que Entre Ríos cuente con 30% de energía sustentable para el año 2030. Esto da un nuevo impulso al proyecto, ya que en ese momento el Intendente tomó la decisión de que Paraná sea el primer municipio que haga un aporte para dar cumplimiento a esta norma.
Para desarrollar un proyecto que estuviera a la altura de las circunstancias, que fuera concretarle en el corto plazo y financiable 100% con recursos municipales se conformó un grupo de trabajo entre los que participaron profesionales del sector con una amplia trayectoria en la materia. Mantuvimos reuniones con empresarios y representantes de gobiernos de distintas provincias del país, que son referencia en el sector como San Juan, Córdoba y Jujuy.
También visitamos la ciudad de Montevideo, Uruguay, uno de los países de mayor generación de renovables en la región. Luego se firmó un convenio con el Rectorado de la Universidad Tecnológica Nacional para la realización del anteproyecto del parque, el proyecto final y el estudio del impacto ambiental, el cual fue aprobado sin objeciones por la Secretaría de Medioambiente de la provincia, constituyéndose como el primer proyecto de energía renovable de gran escala en Entre Ríos.
Entendemos que se trata de un antecedente sumamente positivo para incentivar la inversión privada del sector en nuestra provincia.
–¿Qué ventajas generaría para Paraná?
–Como dije, el parque solar fotovoltaico es una importante iniciativa de la gestión que pone a Paraná como pionera en Entre Ríos en la concreción de un proyecto de energía renovable a escala. Siendo más específicos, además de todas las ventajas que se conocen de las energías renovables, la Municipalidad está dando el primer paso de gran impacto hacia la reducción de huella de carbono.
–¿Qué es la huella de carbono?
– La huella de carbono mide las emisiones de gases de efecto invernadero que generan las actividades económicas y cotidianas del ser humano.
Cada vez que le damos arranque al auto, cargamos el celular o encendemos el lavarropas, entre otras miles de rutinas diarias, dejamos atrás una estela de gases que se acumulan en la atmósfera y sobrecalientan el planeta.
Estas emisiones aceleran el cambio climático. Como advierte la Organización de las Naciones Unidas en sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, si no las neutralizamos a tiempo con la descarbonización de la vida diaria y la economía, y otras medidas, nos espera un mundo más inhóspito.
Con el parque, la ciudad comienza a ser soberana de su propia energía, y es un camino hacia un nuevo paradigma de gestión de la energía en la ciudad. Tiene además beneficios prácticos.
–¿Cuáles?
–Por ejemplo, desde una perspectiva estrictamente técnica, podemos mencionar un efecto de “pick shaving”; el parque solar en funcionamiento ayudará a morigerar el impacto de los picos elevados de tensión en los momentos de mayor exigencia de la red eléctrica.
Además, desde el punto de vista económico, es una inversión en infraestructura que generará un flujo de fondos durante 25 años. En términos simples, hace que el municipio genere superávit vendiendo esta energía. Los resultados de estas ventas luego podrán ser reinvertidos o destinados a fondos de compensación de la tarifa energética.
A futuro
-Más allá del impacto sobre el medio ambiente, la incorporación del parque transforma al municipio de mero consumidor a generador de energía. ¿Qué importancia le asigna?
–Lo principal es que el municipio toma un rol 100% activo en la gestión de energía de la ciudad. A su vez, ser generadores de energía le permitirá al Estado municipal planificar distintas estrategias que pueden estar orientadas a apoyar los diferentes sectores del entramado social.
Es decir, este proyecto también puede entenderse como una nueva herramienta para la generación de políticas públicas que den respuesta a las demandas de la comunidad. Por ejemplo, en varias oportunidades el intendente suele manifestar que, durante los primeros años de generación, la energía producida será destinada a bajar el costo productivo de las industrias para brindarles un factor que les genere mayor competitividad.
–Para poder cuantificar, ¿cuánto aportaría el parque a la demanda de energía de la ciudad?
–El parque en su primera fase de 8MWp de potencia aportara alrededor de 14GWh/año. Esto representa aproximadamente el 20% del consumo del parque industrial.
–¿Cómo se establece el vínculo con ENERSA, una vez que el parque esté en funcionamiento?
–El parque fotovoltaico será vinculado a una estación transformadora que se encuentra en el parque industrial. La proximidad de ambas ha sido un factor de relevancia al momento del desarrollo del proyecto.
–¿Qué plazos rigen para la concreción del proyecto?
–Seis meses a partir de la adjudicación de obra. Si todo va como lo pensamos, el parque estará operativo durante los primeros meses del 2024. Es de relevancia conocer que para la concreción de un proyecto de esta envergadura se deben realizar y ser aprobados diferentes hitos, a saber: anteproyecto, proyecto final, estudio de impacto ambiental, pliego licitatorio, licitación, adjudicación de obra, audiencia pública, y la obra propiamente dicha. Cada una de estas instancias han sido realizadas y ya nos encontramos en la etapa de análisis de oferentes, a través de la Secretaría de Obras Públicas.
Para terminar, quiero recordar que todo este trabajo fue realizado junto a quien fuera secretario de Hacienda, Inversión, Empleo, Ciencia y Tecnología de la Municipalidad, el contador Eduardo Lalo Macri, quien nos acompañó durante el desarrollo de cada una de las etapas de este proyecto.
Volverse amigo de lo natural
No siempre se es enteramente consciente de que el sol es la principal fuente de energía en la Tierra, la más poderosa y, además, una de las protagonistas indiscutidas de la transición energética. El aprovechamiento de esa energía producida de manera generosa tiene múltiples beneficios. Por ejemplo, es inagotable; no genera residuos sólidos ni emisiones a la atmósfera de ningún tipo; y no precisa de un suministro exterior, no consume combustible, ni necesita otros recursos como el agua o el viento.
Al mismo tiempo, no produce ruidos, los sistemas son sencillos y fáciles de instalar y las instalaciones son fácilmente modulables, con lo que se puede aumentar o reducir la potencia instalada según las necesidades.
Por otro lado, las plantas apenas requieren mantenimiento y tienen un riesgo de daño muy bajo. En efecto, los módulos gozan de una larga vida, mientras se fomenta la creación de empleo local y se genera un ahorro económico.
Además, hoy día la tecnología fotovoltaica está madura, en el sentido de que ha superado las etapas experimentales y muestra un rendimiento más que satisfactorio.
La generación de energía limpia, entonces, persigue valores como responsabilidad, sostenibilidad, preservación del medioambiente, tecnología, compromiso, futuro e innovación.
