Con la presentación del libro “Stella Calloni, periodismo, literatura y militancia”, quedó completado el ciclo La Biblioteca en Letra y Música. Como en anteriores ocasiones, la sociedad paranaense pudo disfrutar de la expresión franca, reflexiva y profunda de la invitada, coautora de la obra señalada, Vivian Elem, que, durante la entrevista, generosamente compartió sus puntos de vista. El público colmó la sala y, con un silencio atento, le dio vida a un edificio que atesora un patrimonio único.
Natalia Strack
Luego de cinco veladas en la que Biblioteca Provincial combinó letra y música, el cierre del ciclo quedó a cargo de la periodista, Vivian Elem, nacida en Neuquén, radicada en CABA, quien realizó un recorrido por su historia personal y profesional, compartió qué significó escribir “Stella Calloni- Periodismo, literatura y militancia- Cosas de mujeres”, junto a Mariana Baranchuk; y analizó el lugar que ocupa y los desafíos que conlleva la actividad periodística en la actualidad.
En esta ocasión, el periodista encargado de concretar la entrevista fue Víctor Fleitas, y la ceremonia contó con la participación de Marcia Müller, investigadora, acordeonista, cantautora y docente. También estuvieron presentes los organizadores del ciclo, Claudio Cañete, la dirección de la Biblioteca Provincial, ejercida por Néstor Rodríguez, y Silvia Teijeira, quien una vez más deleitó al público con su interpretación del piano.
Vale la pena detenerse en el hecho de que no son frecuentes en la región los espacios donde los ciudadanos pueden escuchar de primera mano a creadores y emprendedores que han realizado una obra valiosa, aunque no sean figuras destacadas por los grandes grupos de la comunicación.
Junto a LT 14 Nacional Paraná General Urquiza, EL DIARIO acompañó el esfuerzo organizativo. Concluido este primer ciclo, solo resta ponderar la profesionalidad con que fue llevado adelante.
El clima confraternal, de diálogo, que se construyó en cada encuentro es otro logro. Un tercero, la incorporación de temas musicales interpretados en vivo por mujeres del litoral. En este caso, Müller tocó de manera sobresaliente Aquella tarde y El acordeón de la nona, mientras Teijeira se lució con Pa su rastra, de Remo Pignoni.
Es justo ponderar la preparación de la sala y el sonido, a cargo de Sergio Fabri, lo que colaboró para conformar una amable intimidad.
Una mujer de definiciones
Durante la entrevista, Elem definió que para ella el periodismo “es un oficio y un laburo del que he vivido, pero también es una forma militancia en el sentido amplio del compromiso con la verdad, con la información, con responsabilidad social”.
–Si en alguien te preguntada quién es Stella Calloni, ¿qué dirías?.
–Primero que es una entrerriana que no se ha olvidado de su tierra. Es nostálgica, ocupada y preocupada por Entre Ríos y por su historia. Pero muy enamorada de la provincia y con su infancia en Puerto Algarrobo. Ha vivido tanto tiempo afuera del país, pero Entre Ríos es su lugar en el mundo. Destaco que ella tiene una bondad infinita para transmitir el saber, que es propio de los periodistas de su generación. Se ha construido como mujer y ha creado espacios para las mujeres periodistas a las que aún hoy nos cuesta mucho en todos los sectores de la Comunicación.
Creo que Stella vivió mil vidas y es muy difícil plasmarlo en un libro. La caracteriza su sensibilidad, amabilidad, la vitalidad y una memoria que conserva a sus 88 años.
–A lo largo del proceso, ¿cuándo sentiste que finalmente había un libro?
-Para un 7 de junio se me ocurrió preguntar: “¿A qué mujer periodista de todos los tiempos reivindicarías si tuvieras que elegir a alguien?” Ahí apareció un puñado de nombres, entre ellos el de Stella Calloni. Yo la conocía y siempre me sorprendió su humildad. Pensé que era poco conocida en el país. Hay otro libro sobre ella, pero nosotras quisimos darle una mirada de rescate de su condición de mujer.
Stella aceptó. Grabamos durante tres meses, una o dos veces cada semana. No fue cronológico; ella hilvanó los recuerdos y acontecimientos como quiso. Eso costó durante la edición y armado.
-¿En qué momento surgió esta triple caracterización que hacés de ella como periodista, mujer y militante?
-Junto a Mariana Baranchuk, éramos tres mujeres charlando. Nuestra intención era ella como mujer, integralmente. Antes que periodista, es poeta, y tiene un gran compromiso militante. Hay que pensar cómo se conjuga eso y cómo se lleva adelante una vida con hijos, a la que le gusta la cocina, que puede hacer todo con compromiso.
A continuación, los presentes compartieron un sentido video de Stella Calloni, grabado para la oportunidad. “Es tiempo de descolonizar desde el lenguaje hasta la universidad”, propuso allí, entre otras cosas. Luego regresó el tiempo de la entrevista.
Proceso
–¿Cómo armaron el libro?
–Fueron muchas horas de entrevista. Yo me encargaba de desgrabarlas. Apenas terminaba cada jornada, con Mariana evaluábamos lo registrado y planificábamos cómo seguir. Como en su relato todas las dimensiones se entrecruzaban, marcamos con distintos colores las partes en las que se refería al periodismo, a la cocina y a la política.
Dedicamos mucho tiempo a la escritura de citas al pie. El lector lo agradece porque esos datos, que ayudan a contextualizar, no interrumpen la fluidez del relato de Stella. Hemos tenido devoluciones de lectores en las que nos dicen que, entre lo que cuenta Calloni y los pies de página, se obtiene una síntesis de la historia latinoamericana muy fácil de leer. Eso nos enorgullece.
–Entonces, comenzaron con un plan de entrevista y, luego, fueron trabajando en las próximas entrevistas sobre los vacíos que iban quedando, ¿eso fue así?
–Es lo que intentamos, pero Stella habla de muchos temas y son todos deliciosos. Salió en plena pandemia, el 19 de junio, que coincidía con el cumpleaños de Stella. Fuimos a festejar su cumple, con todos los protocolos que estaban vigentes.
Estamos contentas con el libro en general porque las devoluciones han sido buenas.
–Siempre has estado vinculada a proyectos de resistencia o de lucha popular, ¿eso surgió de casualidad o los Elem son una familia comprometida políticamente?
–Nací en un pueblo chiquito, Barrancas, en el norte de Neuquén. Es conocido por Vaca Muerta y porque está el gasoducto a Chile, pero que pagan tres veces más el gas que en Capital Federal. Mi papá era un militante radical, muy irigoyenista. Mamé un nacionalismo popular. En los 70’ conocí la juventud peronista. Y me identifiqué, algo que mi padre nunca me perdonó. Decidí mudarme a La Plata. Ahí hicimos un periódico mural que se llamaba La Pared. Luego, surgió el diario La Voz, en 1982, que buscaba difundir los derechos humanos y las luchas populares. Pidieron jóvenes y allá fuimos. Desde ese momento la rueda del periodismo no se detuvo más.
Por dentro
–¿Cuáles de tus búsquedas sentías que se proyectaban mientras que desde afuera sólo parecía que llevabas adelante una entrevista?
–De esa experiencia me llevo muchas cosas, todas ricas, entrañables. Me gusta trabajar las historias de vida, me interesa lo que las personas han vivido. Eso me reimpulsó. También me legó la mirada latinoamericanista.
Junto a Alipio Paoletti, Guillermo Alfieri y tantos otros, Stella Calloni se forjó en una generación que se caracteriza por la generosidad. Eran algo ásperos para el trato cotidianos, tal vez; pero compartían el oficio sin medias tintas. Nos enseñaban a titular y a editar, se sentaban con nosotros, nos dedicaban tiempo. Te trataban de igual a igual.
“Hay que buscar aquello que uno quiera hacer y ser leal a eso en lo que se cree. Pero buscando un equilibrio entre lo que se quiere y lo que los demás necesitan”.
Para finalizar, se dio la posibilidad de que los asistentes realizaran alguna pregunta. Elem respondió con la misma soltura. “Creo que hay que buscar lo que uno quiere hacer y ser leal a eso en lo que se cree. Pero buscando un equilibrio entre lo que se quiere y lo que los demás necesitan. Creo que hay una diferencia allí entre generaciones anteriores y las actuales. Stella también insiste en esto, no se trata de resaltar en la pregunta porque lo importante es el entrevistado. Se busca contar historias para que otros se sientan identificados. Los periodistas no somos estrellas, somos trabajadores. Los referentes del periodismo antes mencionados, no eran estrellas. Formaron parte de la historia de la Comunicación en Argentina. Hoy, uno de los esfuerzos que hay que hacer es darnos cuenta de la penetración cultural que, si continúa, va a finalizar en no saber quiénes somos. El mundo digital impone, por su brevedad, un fuerte desafío para seguir contando historias emotivas y a la vez continuar explicando aquellas problemáticas complejas. No sé cómo lo haremos, pero debemos intentarlo”.
“El lector agradece las citas al pie que incorporamos porque esos datos ayudan a contextualizar y no interrumpen la fluidez del relato de Stella Calloni”.