Sin duda la idea de “asociarse con fines útiles” impulsó al grupo de vecinos que hace un siglo y medio decidieron crear una Biblioteca Popular en Paraná para, entre otros propósitos, fomentar la lectura e incentivar la investigación, la creación, y promover y difundir la cultura y la educación.
Griselda De Paoli
Especial para EL DIARIO
“Asociarse con fines útiles”, expresa el artículo 14 de la Constitución Nacional. Sin duda la idea puede vincularse al grupo de vecinos que hace un siglo y medio decidieron crear una Biblioteca Popular en Paraná. Es plausible pensar que el grupo apeló a este derecho planteándose objetivos constructivos y proyectivos al gestar la idea de ese espacio para la ciudad. Entre esos propósitos se destacaba esencialmente el de fomentar la lectura e incentivar la investigación, la creación, y promover y difundir la cultura y la educación.
Señala la investigadora Ofelia Sors que la fundación de esta institución “se debió a iniciativas de las logias masónicas locales, que también influyeron con éxito en la creación de nuestra histórica Escuela Normal. Integraban la primera comisión directiva: presidente, Justo Comas; vice, Antonio Zabala; Alejo Amavet; Agustín González; Tiburcio Alvarez Prado, José María Sola, Calixto Sosa y Tomás Milicua; Juan Ramira, Manuel Martínez de Fontes, Pedro Scalabrini, Pedro García, Delfín Coria, bibliotecario, Juan Ceballos y Gregorio Villanueva. Los socios sumaban 164, contando el haber bibliográfico con 904 volúmenes.”
Las bibliotecas populares son asociaciones, sin fines de lucro, cuyo rol esencial es el servicio a la comunidad, pero también contribuir a la preservación de la memoria histórica y a la construcción de la identidad colectiva. En tal sentido, la Biblioteca Popular del Paraná es una institución de valor histórico para la ciudad. Por esta razón, aportar a su preservación y a la continuidad de su valioso hacer es un compromiso colectivo. Como también lo es, de vez en cuando, refrescar la memoria de su devenir y de su acción articulada a través del tiempo.
Durante la presidencia de Domingo Faustino Sarmiento, la Nación sancionó una Ley Protectora de las Bibliotecas Populares y Entre Ríos hizo lo mismo en 1872. Al año siguiente, vecinos fundaron la Biblioteca Popular de Paraná -el 1 de marzo de 1873- que en medio de las revoluciones jordanistas apenas logró subsistir, pero que, restablecida la paz, avanzó para concretar los fines útiles que se propuso y rápidamente logró reunir 164 asociados, 1210 volúmenes, asistiendo a 3.602 lectores. Funcionaba por entonces en el edificio que había sido la Sala de Sesiones de Diputados de la Confederación. Luego se trasladó a la casa de don Saturnino García, sobre calle Andrés Pazos, donde quedó instalada desde 1885. Un lustro más tarde, en febrero de 1890, la institución se mudó a calle Buenos Aires al lado del Colegio Nacional. Al acceso a los libros fue incorporando las conferencias, la cátedra, los conciertos, las exposiciones, congresos, peñas y abriendo sus puertas a aquellas instituciones de bien común que lo requirieran.
SEDE PROPIA
En 1910 la Biblioteca inaugura edificio propio, siendo entonces su presidente el Dr. Antonio Medina. El magnífico edificio, proyecto del arquitecto Rodolfo J. Fassiolo y el proceso de construcción de don Pedro Fabro han sido el tema central de dos artículos publicados en este espacio. De todos modos, no puede dejar de señalarse que sin duda se levantó con los criterios más avanzados en comodidad y estilo. Parte de los costos que insumieron los trabajos debieron ser afrontados con donaciones del vecindario y el aporte de un benefactor de nuestra ciudad, don Enrique Berduc.
En la Biblioteca Popular del Paraná se aúnan, como patrimonio preciado para nuestra ciudad, continente, institución y contenido.
Tal como lo señala el artículo publicado por el 90° Aniversario de la Biblioteca, en la revista del Instituto del Profesorado -en 1963-, “en los varios períodos en que ejercieron la Presidencia Pedro E. Martínez, Humberto Pietranera y Cesar Blas Pérez Colman la Biblioteca organiza las secciones: Autores entrerrianos, Textos escolares, Instituto Bibliográfico y los Cursos de idiomas y de Declamación y Arte Escénico”.
Para ese momento en que celebraba sus 90 años, la Biblioteca estaba bajo la Presidencia del Profesor Filiberto Reula que impulsó la organización de tres nuevas Secciones: el Instituto Entre Ríos, con Hemeroteca, Mapoteca y Discoteca de la provincia; el Archivo de obras inéditas, que acopia, ficha y conserva producciones que no se han podido publicar; y el Cine cultural e infantil.
“En la Biblioteca Popular del Paraná se aúnan, como patrimonio preciado para nuestra ciudad, continente, institución y contenido”.
Los 90 años motivaron, en 1966 una reparación total del edificio, adquiriéndose, además, el terreno del fondo, pensando en futuras ampliaciones. Para esa fecha la Biblioteca atesoraba 51.448 piezas bibliográficas, 1099 socios y para el último ejercicio de esa fecha visitaban sus salas 13.170 lectores y 5.975 préstamos domiciliarios.
Cabe señalar que la institución recibió además el acervo de la Biblioteca Municipal Justo José de Urquiza, y como parte de su vasta acción cultural y educativa fue sede de la Escuela de Arte Escénico y siempre ha dispuesto de aulas para cursos de diversas instituciones.
Actualmente, en el marco de la celebración de los 150 años de su fundación, vuelve a convocar a los paranaenses con una campaña para enriquecer el patrimonio, que es de todos, con imágenes, programas, noticias, invitaciones a actividades que se hayan llevado a cabo en su sede, cosas que preservamos en nuestros armarios y roperos y que podemos aportar con la ventaja de solo tener que ofrecer su escaneo, sin perderlas. Aprovechemos la oportunidad de hacer nuestro aporte al patrimonio que la Biblioteca preserva y comparte.
ÁMBITO COBIJANTE
La Biblioteca Popular de Paraná ha sido y es el escenario de múltiples actividades y propuestas culturales, ha cobijado en su seno el funcionamiento de diferentes asociaciones y ha sido lugar de recepción de importantes visitas nacionales e internacionales.
Por ejemplo allí inició su funcionamiento la Asociación Argentina de Cultura Inglesa en 1938, dictaron conferencias el destacado matemático Dr. Julio Rey Pastor, se presentaron figuras de relieve como Carlos Alberto Salustri, célebre fabulista italiano; el doctor Manuel García Morante; el prestigioso médico argentino Angel H. Roffo; la poetisa chilena Gabriela Mistral, premio Nobel de Literatura del año 1945; el profesor español Lorenzo Luzuriaga, los escritores Rodolfo Mondolfo y Bernardo Canal Feijó; el poeta español Juan Ramón Jiménez. Obras de teatro, recitales, congresos, jornadas, hasta una Sesión de la Cámara de Diputados de Entre Ríos -el día 11 de diciembre 2002- han tenido como escenario el magnífico espacio de la Biblioteca Popular, siempre generoso. Espacio que sigue asombrando a quien lo transita e institución que sin dudas ha hecho y hace honor al derecho de “asociarse con fines útiles”, que sigue convocándonos a los paranaenses.
