1819
Entre Ríos y Santa Fe inician hostilidades contra Buenos Aires.
El apresamiento, en territorio santafesino, de unas carretas que transportaban efectos de guerra del gobierno de Buenos Aires y la detención, en esas circunstancias, del general Marcos Balcarce, implicaron la declaración de guerra.
La pretensión de los directoriales de dominar por la fuerza Entre Ríos y Santa Fe para substraerla del movimiento federalista que acaudillaba Artigas e incorporarlas a la órbita de su influencia política, entró, de tal suerte, en una nueva etapa. Hasta entonces Buenos Aires había llevado la guerra a esas provincias pero desde ahora se invertirían los factores.
Entre Ríos, con Hereñú, primero, en 1814 y con Ramírez después, había rechazado las invasiones militares que se sucedieron en 1817 y 1818 e igual suerte correspondió a Santa Fe en sus empresas contra las penetraciones violentas de Viamonte y Balcaree.
Cuando después de estos sucesos se entró en un período de transición, se sancionó la constitución de 1819, acusada de unitaria, antidemocrática y contraria a los sentimientos federalistas de los pueblos de campaña, reactualizándose el planteamiento de los disgustos anteriores reagravado con el conocimiento que se tuvo de las gestiones encaminadas a obtener la instauración de una monarquía en el país, todo lo cual culminó con la guerra, el triunfo federal en Cepeda y el Tratado del Pilar.
1849
Se comienza la construcción del edificio para el Colegio Histórico del Uruguay.
En Paraná se habían acumulado materiales destinados a la construcción de un gran edificio escolar, pero debido a divergencias suscitadas acerca de su ubicación, en el seno de la comisión encargada de la obra, Urquiza dispuso que se les llevara a Uruguay. Esos materiales se emplearon en la construcción del edificio para el Colegio Histórico que se levantó en el costado oeste de la plaza General Francisco Ramírez, sobre una manzana que medía 4.830 metros cuadrados, ocupando lo edificado 80 varas cuadradas. “El edificio todo, expresa un informe, se construye de los mejores materiales; siguiendo la arquitectura el orden dórico”. Su capacidad fue calculada para 500 alumnos internos. En 1853 se dio término a la obra.
1859
La escuadra de la Confederación combate en Martín García.
Echada a la suerte de la guerra el diferendum que dividía a los gobiernos de Paraná y Buenos Aires, la escuadra de la Confederación, anclada en el puerto de Montevideo, recibió órdenes de forzar el paso fortificado de la isla de Martín García, lo que así cumplió su comandante, el almirante Mariano Cordero. El combate comenzó a las 8.30, manteniéndose un nutrido tiroteo hasta las 11.30 en que la escuadra pudo fondear en el Guazú. En el parte que el almirante pasó al Presidente Urquiza, consignó la muerte del comandante Santiago Maurice, entre los jefes, y “que han sido poco numerosas las pérdidas de las tripulaciones”.
1912
Fallece el poeta Diego Fernández Espiro.
Había nacido en Colón, estudió en el Colegio Histórico del Uruguay y murió en Buenos Aires, a donde llegó joven para militar en el movimiento literario que iniciaron Rubén Darío y Leopoldo Lugones. Fernández Espiro se destacó y triunfó como sonetista. La revista porteña “Novela Semanal”, dedicó a su memoria la edición del 14 de octubre de 1918, publicando un interesante trabajo que firma Hugo del Monte.
En 1901, Fernández Espiro, fundó en Buenos Aires la revista “Juvenalia”. Algunas de sus poesías se publicaron en un libro titulado “Espejismos”. Hizo periodismo en Buenos Aires y Santa Fe. Su anecdotario es abundante y pródigo, propio de su talento y de su ingenio originalísimo.
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