El seleccionado inglés y su par sudafricano, avanzaron ayer a las semifinales de la Copa Mundial de Rugby que se disputa en Francia.
Por los cuartos de final, Inglaterra derrotó aunque sin brillo a su par de Fiji, 30-24, en Marsella. En tanto que en el Stade de France de Saint-Denis, los Springboks doblegaron al dueño de casa, 29-28, para continuar en carrera en la defensa del título.
En el estadio Velodrome, el apertura Owen Farrell resultó pieza clave para el éxito de su escuadra, que ganaba por 21-10 al término del primer tiempo. El equipo de Oceanía, una de las sorpresas del campeonato, apoyó tres veces en el ingoal adversario.
Por su parte, en un choque de alto vuelto entre sudafricanos y franceses, tuvo durante el primer tiempo, un verdadero festival de juego y velocidad con dos equipos exhibiendo profundidad y eficacia, favoreció al combinado local (Les Bleus), por 22-19.
El try marcado por el segunda línea, Eben Etzebeth, le permitió a los sudafricanos volcar desarrollo y resultado (26-25, a los 27m. del segundo tiempo) a su favor, cuando la situación le era esquiva. Dos tries de Cyril Baille y otro de Peato Mauvaka consolidaron ese dominio galo, además de los tres penales más dos conversiones aportadas por el fullback Thomas Ramos.
Además del apoyo en el ingoal de Etzebeth, el equipo ganador marcó otros tres tries (todos en los primeros 25 minutos de cotejo), por cortesía de Kurt Lee Arendse, Damian de Allende y Cheslin Kolbe. El apertura Handre Pollard colaboró con una patada a los palos y un penal, mientras que Manie Libbok sumó dos conversiones.
De esta manera, el fin de semana venidero tendrán lugar las dos llaves de semifinales, en el mítico Stade de France. Por un lado, el viernes se medirán Argentina-Nueva Zelanda, desde las 16. Mientras que el sábado a partir de la misma hora, se cruzarán Sudáfrica-Inglaterra.