Se trata de la primera exhibición permanente sobre la Biblia en Argentina y se aloja en la sucursal que los testigos de Jehová tienen en el país.
Es una de las 12 exhibiciones alrededor del mundo que presenta esta organización religiosa internacional.
El museo exhibe una nutrida colección de Biblias y describe los enormes esfuerzos que se hicieron durante siglos para traducir este milenario libro al español. La muestra incluye 47 Biblias, y entre ellas hay algunas muy poco comunes, como la primera edición de 1602 de una de las traducciones al español más utilizada: la Reina-Valera. También se exponen escritos que dieron origen al español moderno, como una hoja original de la Vulgata Latina escrita a mano en los años 1200-1300. Otro aspecto destacable es la exhibición de documentos originales antiguos, como pergaminos y vitelas, que muestran los diferentes formatos y materiales que se usaron para copiar la Biblia a través de la historia.
La colección también incluye traducciones de la Biblia que se hicieron en Argentina; por ejemplo, El Nuevo Testamento de Pablo Besson de 1919. Además, hay traducciones modernas a lenguas de pueblos originarios, como chorote, mapudungún, mocoví, pilagá, toba del oeste, toba qom y wichí.
Marcos Donadío, portavoz de los Testigos de Jehová comenta: “No se trata simplemente de una muestra de Biblias; la exhibición se ha pensado de forma que estos ejemplares lleven al visitante a sumergirse en la fascinante historia de este libro único. Además, el museo ofrece una experiencia interactiva con diversos recursos tecnológicos que logran que el recorrido sea ameno y didáctico. Con el objetivo de que más personas lo visiten, se ha traducido el contenido a seis idiomas, incluyendo la lengua de señas argentina”.
Como la inmigración ha tenido mucha importancia en la historia de Argentina, la exposición también incluye traducciones de la Biblia en idiomas que hablaban los inmigrantes que llegaron al país durante el siglo XIX. En un recorrido a través de Biblias antiguas en alemán, armenio, croata, gaélico irlandés, galés, hebreo, húngaro, inglés, italiano y portugués, entre otras, el visitante podrá descubrir cómo las corrientes migratorias ayudaron a que los habitantes de nuestro país tengan acceso a la palabra de Dios.
Un visitante dijo: “Me impresionó ver el estado de conservación de ejemplares de la Biblia invaluables, así como el diseño de esta impactante exposición. Vale la pena visitarlo.”
Además del museo de la Biblia, los visitantes también podrán recorrer una exhibición histórica que destaca la resiliencia de individuos que, por profesar su fe, sufrieron hostigamiento, especialmente durante la dictadura militar argentina.
Los Testigos de Jehová abrieron su primer museo bíblico interactivo en el año 2017, en su central mundial ubicada en Warwick, Nueva York. Más tarde, se abrieron otras muestras en diferentes ciudades importantes del mundo. Todos los días, cientos de personas visitan esos museos. Entre los visitantes hay personas de diversas creencias y antecedentes religiosos.
“Queremos que los visitantes puedan aprovechar al máximo todo lo que nuestro museo tiene para ofrecer”, dijo Donadío, “y esperamos que se vayan con una mejor comprensión de la Biblia y del papel clave que esta tiene en muchas personas de fe”.
El museo se encuentra ubicado en la localidad de Nordelta, en Boulevard de la Plaza 255. Está abierto al público en general y la entrada es libre y gratuita. Puede recorrerse de lunes a viernes en el horario de 8:00 a 16:00 h.
Para más información visite jw.org.