Queremos que más niños tengan oportunidades de practicar canotaje
La Escuela Municipal de Canotaje de Paraná brinda un espacio a la comunidad para que se relacionen con el canotaje, desde una manera recreativa hasta más deportiva. Además, ayuda a promover los beneficios que pueden disfrutarse por estar a la vera del Río Paraná. El profesor encargado de la escuelita, Pablo Taulada, analizó lo que fue este 2023 en comunicación con EL DIARIO.
Sobre el puerto de Paraná hay un lugar que constantemente hace una invitación al paranaense a aprovechar las oportunidades que el río ofrece.
La ECCENA, que es la escuela municipal de canotaje, significa hoy un espacio que contiene a los niños, les ayuda y da oportunidades de crecimiento no solo en el deporte, sino en la vida.
Uno de los profesores que vive el día a día de este lugar es Pablo Taulada, quien habló con EL DIARIO para difundir las actividades que le dan vida a la ECCENA, analizó lo que fue este año y los proyectos para el futuro cercano.
¿Qué balance merece este 2023?
-Fue bastante bueno, desde que arrancó con los juegos de verano en la playa, después empezamos con la escuelita municipal, en la que contamos con gente nueva, pudimos hacer otro tipo de actividades, usamos otro tipos de botes, los chicos se afianzaron y cambiaron el modo de pala, ajustamos un poco la técnica.
A medida que iba pasando el año, los chicos mantuvieron un cupo de 12 personas y se sumaron un par más.
¿Qué actividades son las cotidianas en la escuelita?
-Más allá del deporte hacemos otras cosas, como jornadas de limpieza, juntadas y reuniones.
A veces no tenemos clases y vienen igual aunque sea a tomar mates o ayudar. Hay un chico que arregla botes, ayuda con la escuela, se le abona el trabajo, y tiene un espacio para aprender el oficio.
Lo de la limpieza son ellos mismos los que piden y con nuestras propias herramientas vamos a la dársena, a la entrada y al islote. Si se suma alguien nuevo le recalcamos que preste atención de no dejar mugre y de cuidar las herramientas.
¿Cómo es cuando alguien nuevo entra al grupo?
-Los que están le dan la bienvenida, le indican cómo ponerse el chaleco, agarrar la pala, qué piragua usar, le explican y lo hacemos sentir bien en el grupo y que se sienta contenido y participe.
Asimismo, queremos que conozcan el río, es importante porque muchas veces no conocen el Paraná, sus lugares de paz, tranquilidad y armonía. Todos tienen esa posibilidad de estar en el río y practicar el canotaje, que es un deporte sumamente sano. La invitación está hecha y la única exigencia es saber nadar.
¿Qué podrías describir de lo que representa la ECCENA en la comunidad?
-Lo social es todo, la escuela de canotaje es un gran lugar de contención más que nada.
Siempre les enseñamos muchos valores para que les ayude a formarse un poco más. Acá los chicos se cuidan entre ellos y todos estos aspectos van fomentando el crecimiento personal. La Eccena es un lugar que representa su segunda casa, los propios chicos lo sienten así.
¿Cómo se mezcla la parte recreativa con lo deportivo?
-Lo que más remarco es que para acercarse al río, primero es la parte recreativa de subirse a la piragua, tirarse al agua, conocer lugares, remar, meterse en lugares que no entre una lancha, recorrer la isla, hacer amigos, hacer juegos en el agua, probar otros tipos de botes y demás.
Después cuando están un poco más confiados, hay una invitación a avanzar. Puede ser con un cambio de pala o invitarlo a una regata. Luego está en el alumno querer o no. Ya el querer implica una disciplina, una voluntad y una responsabilidad.
Pero siempre en este espacio tiene que haber lugar para la parte deportiva y la recreativa. Ellos en la competencia, se afianzan más con el compañero. La medalla o el trofeo lo valoran muchísimo, eso le da más gratitud y los motiva más.
¿Cómo trabajan en lo deportivo?
-Hay tres chicos que compitieron en torneos entrerrianos, algunos tenían dos o tres carreras. Y fue todo a pulmón, con bote y pala prestados, con entrenamientos fuera de hora en los horarios que ellos podían, pero siempre con la iniciativa propia de prepararse para competir.
Este año fue algo increíble e histórico en este aspecto, porque años atrás intentamos entrar a los Juegos Evita con el selectivo de varones pero no pudimos. Y este año se dio que participe una niña, Daira Rodríguez, quien había empezado en el verano y de a poco la fuimos motivando para que intente competir. Pudo agarrar vuelo, viajó a Mar del Plata y vivió esa experiencia, apoyada por la Eccena y la familia. Para nosotros va a quedar en la historia esa niña porque fue la primera vez que una dama clasificó desde una escuela municipal.
¿Qué proyectos hay para el año entrante?
-Para trabajar hay un montón de cosas, siempre pensamos en mejorar la calidad de las clases. También hay un montón de proyectos que se pueden hacer como campamentos, una bajada de Villa Urquiza que está pendiente, seguir compitiendo y que los chicos empiecen a usar los botes de competición. Ahora es una etapa linda porque en verano usan botes muy finos e inestables, por lo que se pueden corregir algunas técnicas.
Hubo cambio de gestión, ¿Ya saben cómo se va a trabajar en adelante?
-Hemos tenido reuniones con los funcionarios de deporte y la verdad que tuvimos una linda respuesta en el sentido que nos dan libertad y democracia para trabajar.
Que apoyen, den ideas, que dejen hacer y que escuchen, nos da mucha satisfacción y ganas de trabajar. Es una alegría porque estos tres años no lo pudimos hacer, siempre para realizar algo teníamos que esperar un montón de tiempo el visto bueno.
Este secretario nuevo se puso a la par nuestra y es uno más. Deseo que le vaya bien porque si eso pasa, más la ayuda de los profes, de a poquito va a seguir creciendo este deporte. La idea es que crezca en toda la ciudad y que haya más chicos vinculados al deporte y tengan oportunidades para practicarlo.