A principios del siglo XX en Paraná se fueron fundando clubes e instituciones deportivas. El objetivo era desarrollar actividades deportivas, principalmente fútbol y básquet, pero también atendían a los aspectos sociales.
Fernando Ponce
Especial para EL DIARIO
Hacia los años ’30 emergió una práctica deportiva, el ciclismo, que tuvo en nuestra ciudad a verdaderos baluartes no solo a nivel local, sino también provincial, nacional e internacional. Es el caso de Mario Mathieu y Humberto Varisco.
La práctica tuvo sus entidades específicas. El Club Ciclista nació en un bar, se llamaba Café Fraternal y un 1º de junio de 1921. Veintitrés personas fundaron el club destinado al ciclismo. Unos años más tarde la institución tuvo una sede en calle Italia y con el tiempo, en 1938, se trasladó a su actual, en calle Santiago del Estero.
Ciclista tiene una tradición, desde su creación en adelante inculca el deporte, la vida sana, el compañerismo, la fábrica de hacer amigos, que termina siendo más importante que todos los logros obtenidos.
Ahora, el deporte era cuestión de hombres, salvo raras excepciones. En efecto, durante la primera mitad del siglo XX, fueron muy pocas las mujeres que se atrevieron a la práctica deportiva.
El panorama cambió hacia finales de los años ’50 con la incorporación de la mujer al mundo laboral, profesional, político y por ende al deporte.
Aquí, un grupo de mujeres, en una jornada organizada por el Club Ciclista de Paraná y la Asociación Ciclista de Entre Ríos. La postal fue registrada por EL DIARIO y publicada en 1959.
Fuente: Colección El Diario, que se encuentra disponible para la consulta en el Archivo General de Entre Ríos, Alameda de la Federación 222.