Mientras dirigentes provinciales acuden a la Justicia Federal para que no se suspenda la ayuda de Nación, la Fatap y empresas advierten por la grave crisis del sector en el interior del país y confirman que continuarán con las medidas de fuerza. En Paraná, el servicio se cortará a las 14:30
Funcionarios de distintas provincias de la Argentina advirtieron este martes por la suba de tarifas en el transporte de pasajeros, en su mayoría superiores a los $1.000, a partir del recorte de subsidios por parte del Gobierno nacional.
En tanto que el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, firmó un pedido de medida cautelar ante la Justicia Federal reclamando el pago del subsidio nacional destinado al servicio de transporte.
El ministro de Transporte de la provincia de Buenos Aires, Jorge D’Onofrio, remarcó que “con el anuncio de Economía de Nación, quien pagaba $1.800 para ir de Madariaga a Villa Gesell, va a pagar $ 5.000”, y agregó que algo similar “va suceder en Mar del Plata, en Bahía Blanca; por ejemplo, Punta Alta-Bahía Blanca va a ser $ 2.000 o $ 3.000, afecta a todo el interior”.
En esta línea, opinó que “la quita de subsidios es una venganza por la caída de la ley ómnibus”, e instó que desde la administración “reflexionen, esto no se lo están haciendo a un Gobernador, se lo están haciendo a la gente”.
Por su parte, el ministro de Desarrollo Productivo de Santa Fe, Gustavo Puccini, aseguró que esa provincia “reclama la devolución de subsidios que le son propios” y apostó al “diálogo” para darle una solución al conflicto desatado a partir de la decisión del gobierno nacional de eliminar subsidios a las provincias.
“En enero de este año los santafesinos aportamos pagando impuesto a los combustibles unos $3.900 millones, de los cuales solo volvieron $490 millones por coparticipación”, precisó en diálogo con Radio 2 de Rosario.
También el secretario General del gobierno santafesino, Juan Cruz Cándido, aseguró que “Santa Fe ya viene poniendo plata en el sostenimiento del sistema y esos recursos van a seguir estando”, pero afirmó que no puede “garantizar la cobertura de los recursos que Nación dejará de aportar, por ende va a haber un cambio en la tarifa”.
En tanto, el secretario de Transporte de Córdoba, Marcelo Rodio, afirmó que el boleto del transporte urbano en la ciudad capital rondaría “entre $1.100 y $1.200”, mientras que “en el interior de la provincia, en el transporte interurbano tiene que regir una suba de cerca del 40% o 50% porque al sacar los subsidios nacionales realmente toca en el boleto y en la gente”, explicó a Radio 10.
Además, mencionó que “el lunes escuchaba al intendente de San Francisco (Damián Bernarte), que decía que corría riesgo de que no tengamos más transporte público en esa ciudad”. Como ejemplo, mencionó el caso de Rosario, donde “la municipalidad estima que la tarifa va a llegar a $1.000”.
En la ciudad de San Luis, desde el 1º de febrero el boleto de transporte urbano cuesta $250 con subas mensuales de acuerdo a la inflación y los costos operativos, según el aumento aprobado por el Concejo Deliberante de la capital puntana el pasado 30 de enero. A ese ajuste se sumaría ahora el resultante de la quita de subsidios que aún no se ha concretado.
Por ejemplo, un boleto para viajar hacia Villa Mercedes, distante a 100 kilómetros de la capital provincial, cuesta desde $3.000 hasta más de $6.000 de acuerdo con el servicio que se elija.
Frente a la quita de los subsidios a las provincias el gobernador de San Luis, Claudio Poggi, aseguró que la provincia “no podría asumir el porcentaje de la quita de subsidios al transporte y que junto a otros mandatarios provinciales y secretarios de transportes buscarán una postura común” para enfrentarlo.
Por su parte el secretario de Transporte de esa provincia, Víctor Cianchino, solicitó “con carácter de urgente” una nueva audiencia con el secretario de Transporte de la Nación para abordar en detalle” la preocupante reducción de los subsidios nacionales y avanzar de manera inmediata en la implementación de la tarjeta SUBE en San Luis”.
En la provincia, explicó, los subsidios significan un 38% de los costos operativos, y en la actualidad, por cada $ 100 que ingresan a las empresas de colectivos, $ 45 los aporta el Estado provincial, $ 38 el Estado nacional y los $ 17 restantes provienen de la tarifa que paga el usuario, explicó.
A su vez, el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, firmó junto al intendente de Comodoro Rivadavia, Othar Macharashvili, un pedido de medida cautelar reclamando “el pago del subsidio nacional al transporte público de pasajeros”.
“Torres destacó también que a partir del mes de diciembre el propio Gobierno del Chubut incrementó ya en un 50% el monto total de la erogación correspondiente al subsidio al transporte que depende de Provincia”, según un comunicado de la Subsecretaría de Información Pública.
ENTRE RÍOS. Cabe recordar que en la conferencia de prensa brindada por el gobernador entrerriano, Rogelio Frigerio, la semana pasada, el mandatario se refirió a este conflicto.
“Estamos colaborando con los intendentes. En todos los lugares del mundo se subsidia, porque se entiende en general que el transporte público tiene externalidades positivas para la sociedad y el ambiente”, indicó. Pero acotó: “El problema es que el gobierno nacional se ha corrido de este tema, no ha transferido un solo centavo. En casi 60 días no hemos recibido un solo peso, de ningún tipo, tampoco en materia de subsidios”.
El entrerriano señaló la importancia de haber conformado una mesa de emergencia en la materia con intendentes que tienen transporte urbano: “Estamos buscando cómo resolver el tema. Nos dijeron que a fin de mes podría haber algunos recursos y haremos lo posible para que la tarifa no refleje los costos de mantener el transporte, con un esfuerzo provincial y municipal. Intentaremos compensar por un mes la falta de aportes comprometidos por la Nación. Luego iremos viendo. Nos han dicho que se van a poner al día, esperemos que sea así”.
Asimismo, la provincia conformó con intendentes de aquellas ciudades que tienen el servicio, una mesa para el desarrollo estratégico del transporte urbano, para buscar la unificación de tarifas y subsidiar a los usuarios, ya no a las empresas.
COMUNICADO DE LA FATAP. La Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros emitió un comunicado en el que advierte por la grave crisis del servicio de colectivos urbanos en el interior del país. Allí las empresas señalan que se trata de una crónica conocida que “se encaminaba hacia un triste final”.
En el texto señalaron que el proceso de deterioro del sistema de transporte encontró su punto cúlmine con “la intempestiva decisión del Gobierno Nacional de eliminar el Fondo Compensador del Transporte y toda asistencia al Transporte del Interior”. Cabe recordar que mientras tanto, en ciudades como Paraná sólo circulan desde las 5 hasta las 14.30.
Reconocen que los más afectados son estudiantes, trabajadores, profesionales, monotributistas y adultos mayores -principales usuarios del transporte público- quienes “padecerán un sistema precario, ineficaz e inseguro, si no se adoptan medidas urgentes”.
Desde Fatap también niegan ser responsables de la crisis. “En verdad, fueron dramáticamente perjudicadas por la licuación de sus patrimonios y la asunción de numerosas deudas a causa de la necesidad de mantener la regularidad y continuidad de los servicios en condiciones anómalas, carentes de previsibilidad económica y financiera, con reglas de juego precarias y sometidas a decisiones arbitrarias, ajenas a toda consideración técnica”.
Reclamos de las empresas de colectivos
a) El sistema de transporte público del Interior se encuentra en una crisis económica y financiera que no admite indefiniciones en ningún aspecto. Es imprescindible generar de modo muy urgente un marco legal y económico previsible, sostenible y duradero.
b) No existe capacidad empresarial para absorber ningún costo operativo adicional, antes bien, se requieren imperiosamente aportes que permitan la recuperación del capital perdido.
c) Los recursos deben ser generados en el momento en que el usuario consume el servicio, ya que las empresas del sistema han perdido el crédito comercial con sus proveedores, y las obligaciones asumidas a causa de la crisis generada por sus concedentes no pueden seguir agravándose a las tasas actuales.
d) Se necesita, de modo inmediato, un plan de financiamiento a largo plazo de las obligaciones devengadas, impositivas y de adquisición de capital de trabajo e infraestructura, con cargo de los intereses a los responsables del sistema de transporte.
“Sin un plan de acción que implemente inmediatamente lo expresado en los puntos anteriores, con la conformación de una mesa de trabajo integrada por las autoridades municipales, provinciales y FATAP, que genere las normativas y diseñe las acciones necesarias, la República Argentina será menos federal y menos igualitaria, ya que los ciudadanos del Interior serán privados del único servicio de transporte público del que disponen, que es esencial para el desarrollo social y económico de sus comunidades”, finaliza el texto.
BUSES PARANÁ
El gerente de Buses Paraná, Marcelo Lischet, confirmó que hoy el servicio de colectivos volverá a cortar a las 14 horas y remarcó que está a la espera de que la Municipalidad de Paraná cite a la empresa a una reunión del Sistema Integral del Transporte Urbano (SITU).
“Mañana (por hoy) hay reuniones importantes por el transporte del interior con gobernadores e intendentes de casi todas las provincias”, indicó Lischet, aunque no indicó si estarán presentes Rogelio Frigerio y Rosario Romero, y se refirió al comunicado de la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (FATAP), que nuclea a las empresas de colectivos.
Lischet amenazó, además, con la imposibilidad para comprar gasoil para las unidades con este diagrama para la prestación del servicio.
Los usuarios de Paraná, San Benito, Colonia Avellaneda y Oro Verde sufren la falta del servicio de transporte público de pasajeros, desde el pasado 8 de febrero, a raíz de la reducción de horarios que implementó la empresa prestadora.