Por una iniciativa de Evocación Litoral el Día Mundial del Agua se conmemorará mañana con una función integral con variadas propuestas artísticas. Será este viernes en Casa de la Cultura de Paraná, a partir de las 20.30.
Alejandro Ciancio, Alicia Guerreiro, Enzo Culasso y Agustina Monzón, conforman Evocación Litoral. Se trata de una agrupación que toma su nombre de un modo de recordar –“volver a pasar por el corazón”, dicen sus integrantes. En ese sentido, el grupo se propone revincularse “con nuestras raíces, de dónde venimos y quiénes somos, para romper con la ilusión capitalista de que estamos separados de la tierra o que podemos poseerla.”
Enrolados en una línea de trabajo que promueve un paradigma sostenible y colaborativo, estos artistas rescatan “lo que nos señala los pueblos originarios: la tierra no nos pertenece, nosotros pertenecemos a ella; y lo que a ella le pasa, nos pasa.”
Desde esa perspectiva, se han integrado en este proyecto que definen como “una conjunción de música, arte, danza, poesía y derechos de la naturaleza, que busca interpelar desde las emociones y el sentido de pertenencia a este territorio surcado por agua.”
Por esta razón es que mañana “en el Día Mundial del Agua, honraremos al elemento vital que nos compone y define como seres de Entre Ríos, de entre orillas, islas, selvas, montes y humedales.”
El agua, subrayan “es el común denominador de todo lo que está vivo, y a su vez, las aguas expresan la sensibilidad de lo que éste sistema depredador nos está provocando, en su acelerado afán de convertir la naturaleza en ganancias para unos pocos a costa del sufrimiento colectivo.”
En consonancia con esta posición, es que Evocación Litoral organiza este viernes desde las 20.30 en la Casa de la Cultura de Entre Ríos, un encuentro artístico multidisciplinario con participación de sus integrantes.
INVITADOS
El encuentro contará con la participación de un grupo muy especial de referentes de la música, la fotografía y la nutrición.
Durante el encuentro compartirán su propuesta la cantante María Silva; el bandoneonista Gustavo Reynoso; el trombonista Ernesto Marval; el contrabajista Martín Carrere y la violoncellista Carla Franc.
A ello se sumará la poesía, narrada por Germán Rearte, la fotografía de Alan Feyt, y “como creemos esencial una alimentación con perspectiva socio ambiental” estará Glenda Mangia con Conciencia Nutritiva”, agregaron.
“Les invitamos a sumergirnos en las profundidades de nuestra identidad, para a partir de allí defender lo que somos, un territorio hidro social con historias, culturas, memorias y resistencias.”, expresaron los organizadores.
Para reservas de entradas, con un costo de $3.000, los interesados pueden comunicar al 343-4600626.
Preciado recurso
Cada 22 de marzo se celebra en el mundo el día de El agua y el cambio climático. El agua potable es un bien escaso que se ve amenazado por la contaminación y el cambio climático. Usar el agua de manera eficiente ayuda a reducir los gases de efecto invernadero.
El día mundial del agua se celebra desde 1993, luego de que fuera declarado así por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el objeto de concientizar al mundo sobre la importancia de cuidar el agua dulce como recurso vital.
La intención de esta fecha es, por un lado, difundir la relevancia del agua dulce para la humanidad y por otro, crear conciencia sobre los 2.200 millones de personas (alrededor de 3 personas de cada 10) que en pleno siglo XXI siguen viviendo sin acceso al agua potable.
Cabe recordar que aunque el 70% de la superficie del planeta Tierra está cubierta de agua, sólo el 2,5% es agua dulce y el restante es salada (océanos, mares y aguas subterráneas saladas). La mayoría del agua dulce está congelada en glaciares y napas subterráneas inaccesibles. Se estima que menos del 1% de los recursos de agua dulce están disponibles para consumo.
El uso responsable del agua es un deber y una obligación, ya sea que se trate de viviendas, empresas o instituciones.
El cuidado del agua es una responsabilidad de todos. Con pequeños cambios en nuestros hábitos podemos contribuir a mejorar la problemática de este recurso. Es nuestro deber para con las generaciones que vendrán.
