Acordaron prisión domiciliaria para el hombre acusado de matar a su padre
Ayer se le tomó declaración al imputado en su casa, donde se recupera de las graves heridas que se auto infringió tras haber matado a su padre a puñaladas. El hecho ocurrió el 16 de marzo en la capital entrerriana.
La jueza de Garantías de Paraná, Elisa Zilli, resolvió ayer hacer lugar al acuerdo al que arribaron el fiscal, Mariano Budasoff, y el defensor, Claudio Berón, y dispuso que Walter Javier Sosa, de 41 años, cumpla 90 días de prisión en la modalidad de arresto domiciliaria mientras se toman nuevos testimonios y se avanza en la investigación.
Según se informó en la audiencia, el acusado de asestar nueve cuchillazos a su padre, Ramón Abelino Sosa, de 85 años, mientras dormía, pudo prestar declaración de imputado y lo hizo en la casa de una familiar donde va a cumplir con la medida de coerción morigerada.
La declaración fue posible en virtud de que recientemente fue dado de alta de las graves lesiones que se auto infringió después del hecho y que pusieron su vida en riesgo, cuando fue divisado por personal policial que rastrillaba la zona del lugar del hecho, por lo que participó de la audiencia por vía remota.
Las partes reconocieron ante la jueza que están vigentes, a partir de la declaración de imputado, los riesgos procesales, principalmente el de entorpecimiento de la investigación, habida cuenta que el fiscal indicó que está en condiciones de tomar ocho declaraciones a testigos que es necesario preservar para que puedan declarar libremente en un hipotético futuro juicio.
Budasoff, sin dar precisiones, señaló que del devenir de las tareas investigativas podrían surgir circunstancias excepcionales de atenuación que podrían modificar la calificación legal que provisoriamente se le imputó a Sosa hijo, consistente en la de Homicidio agravado por el vínculo, que sólo prevé una pena: la prisión perpetua.
CALIFICACIÓN LEGAL. Tras la audiencia, el abogado Berón, dialogó con la prensa y adelantó que podría surgir otra calificación legal en la causa y, de esa manera, su defendido eludiría la cadena perpetua.
“Vamos a aportar varios testigos para ir dando nuestra teoría del caso y explicando los motivos y circunstancias del hecho que sucedió”, expresó el letrado.
Consultado sobre esas posibles atenuaciones en la condena, Berón explicó que “si uno lee fríamente lo que es la calificación legal, la única pena es la de perpetua, pero desde la defensa vamos a intentar probar que hubo circunstancias extraordinarias que llevaron a este lamentable suceso. Y lo vamos a ir probando con testimonios y pruebas psicológicas”. En caso de lograrse esta modificación de carátula, “vamos a dejar la perpetua y la pena baja considerablemente ya que estaríamos ante un homicidio simple”.
En este sentido, dijo que le interesa que se tomen varias testimoniales de familiares directos, los cuales darían cuenta “de la situación real de convivencia” en el domicilio.
La propia hermana de Sosa es garante de la prisión domiciliaria y el abogado manifestó que el hombre cuenta con el apoyo de la familia.
“Una cosa es la emoción violenta, y otra son las circunstancias extraordinarias de atenuación, una es más grave que la otra y por eso se va a trabajar con pericias psicológicas que darán claridad y certeza sobre la situación”, acotó Berón.
Finalmente, y sobre el estado de salud de Sosa, mencionó que “se recuperó hace cuatro o cinco días, pero su situación médica es compleja, con curaciones, dolores y reposo, no he hablado todavía con él sobre lo que pasó ese día”.
El hecho
A Sosa hijo se le imputó que “el día 16 de marzo de 2024, en momento previos a las 1:20, luego de haber mantenido una discusión por motivos que se desconocen, se dirigió al dormitorio de su padre, Ricardo Abelino Sosa, y lo atacó con una cuchilla compuesta de un mango de madera de diez centímetros de largo con hoja de 20 centímetros de largo y aproximadamente cinco centímetros de ancho, asestándole gran cantidad de puñaladas en la cara y la espalda mientras la víctima se hallaba recostado sobre su cama. Como consecuencia de las heridas Ramón Abelino Sosa falleció en el lugar. Posteriormente al ataque, Walter Javier Sosa, se auto infringió heridas lacerantes de gravedad que determinaron su internación en el Hospital San Martín. El hecho ocurrió dentro del domicilio ubicado en calle Amancio albariño al 1200 de esta Capital donde ambos convivían”.