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La velada de gala presenta a Camila Quiroga

El 9 de Julio de 1938 Camila Quiroga se presentaba en el Teatro 3 de Febrero. En el marco de la velada de gala por el Día de la Independencia, la consagrada actriz nacida en Chajarí, brilló en el escenario mayor de la capital de la provincia. Fue la única vez que la artista actuó en Paraná.

Rubén Bourlot
Especial para EL DIARIO

EL DIARIO, en su edición del 7 de julio de 1938, anunciaba la presentación en el teatro 3 de Febrero de Paraná de la “artista eximia” Camila Quiroga. El 9 de julio en tanto se presentaría con una obra en la velada de gala en conmemoración de la independencia.
La actriz había nacido en Chajarí (Entre Ríos), el 19 de marzo de 1891, en el hogar de sus padres César Passera y Constanza Saltery (uruguaya) con el nombre Camila Josefa Ramona Passera.
En 1906 Camila se trasladó a Buenos Aires junto a su familia e inició su actividad actoral en un grupo de teatro vocacional donde fue descubierta por Armando Discépolo, nada menos. Tiempo después tomará apellido de su esposo Héctor G. Quiroga y será conocida como Camila Quiroga.
Los primeros pasos en su carrera profesional los dio en 1915 con el filme Mariano Moreno y la Revolución de Mayo, bajo la dirección de Enrique García Velloso. Luego vendrán, en 1916, Por mi bandera; Tierra Argentina; Dios te bendiga; y Resaca, bajo la dirección del italiano Atilio Lipizzi.
En el teatro actuó con la compañía de Pablo Podestá en 1917 estrenando la obra de Emilio Berisso titulada Con las alas rotas, también con buen suceso. 
Pero sin dudas que su actuación consagratoria como actriz dramática será con el filme Juan sin ropa, estrenado el 4 de junio de 1919.

CINE TESTIMONIAL

La obra Juan sin ropa, aun sin voces y sin colores, contó con dirección del francés Georges  Benoît y guión del anarquista José González Castillo, Julio Scarcella y Héctor G. Quiroga -esposo de Camila-, los dos últimos también protagonistas del filme. La producción estuvo a cargo de la compañía Quiroga-Benoît Film, una asociación entre el matrimonio Héctor y Camila Quiroga con Benoît.
El filme testimonial se estrenó meses después de las luchas obreras que estallaron en Buenos Aires en la llamada Semana trágica, de enero de 1919, cuando fueron violentamente reprimidos los trabajadores metalúrgicos en huelga de la fábrica Vasena. La represión arrojó 12 muertos y un centenar de heridos según una acotada versión oficial.
El rodaje de la obra había comenzado a fines de 1918 cuando se iniciaba el conflicto obrero. Sin dudas los autores presintieron el clima de época y dieron el primer paso del cine realista testimonial argentino.
Luis Alberto Salvarezza recopiló las repercusiones de la película “que por su temática y nuevas técnicas, el uso del montaje paralelo, el manejo de los contraluces, el dinamismo en las escenas de masas y otros recursos, convirtieron al film en un éxito.” Para Domingo Di Núbila es “…la primera cinta que se puso de parte del proletariado con total combatividad.” 
La revista Caras y Caretas del 14 de junio de 1919 publicó una fotografía de Camila Quiroga acompañada con un texto referido a su labor teatral. “La Quiroga es sentimental sin caer en la sensiblería, detalladora (sic) sin amarenamiento. En varias ocasiones ha sabido enmendar papeles poniendo amargura donde solo había pesares ridículos.”
En síntesis el argumento de Juan sin ropa es la historia de Juan Ponce (Héctor Quiroga), un trabajador proveniente del campo, que se empleó en un frigorífico cuyo propietario es caracterizado como una persona mezquina y arbitraria en el trato con los empleados. Esta circunstancia movilizó a que Juan se convirtiera en un dirigente sindical y promoviese una huelga que culminó con una violenta represión policial. Tratando de escapar de la represión fue auxiliado por una joven, Elena (Camila Quiroga), que es justamente la hija del dueño del frigorífico y de quién se enamoró.
Ante la imposibilidad de seguir con su empleo en el frigorífico Ponce volvió al campo donde se dedicó a la producción agrícola. Simultáneamente comenzó a preocuparse por la condición de los chacareros que debían malvender su producción a los acopiadores de granos. Los instó a organizarse para defender sus derechos y esto lo enfrentó al caudillo político del lugar. Mientras tanto Elena, por exigencias de la familia, se había tenido que casar con un rico estanciero que tiempo después murió asesinado. Este hecho trágico finalmente les abrió la puerta para el encuentro entre Elena y Juan.

DEL TEATRO AL RADIOTEATRO

Tras el éxito de Juan sin ropa la carrera de Camila continuó en ascenso. Alternó sus actuaciones entre el cine y el teatro donde tuvo destacadas actuaciones en obras como Aurora boreal (1924), de José González Castillo; La divisa punzó (1923), de Paul Groussac; La melodía del jazz (1931) y El pan comido en la mano (1934) de Jacinto Benavente, entre muchas otras. En el Teatro Astral,  en 1939, su compañía  estrenó Mercado de amor en Argelia, con dirección de Edmundo Guibourg, obra en la que trabajó Eva Duarte. También actuó junto a Carlos Gardel, Florencio Parravicini, Lola Membrives, Pablo Podestá, Blanca Podestá y Alfonsina Storni.
El 1930 nacía un nuevo género dramático, el radioteatro, donde la voz de Camila se hizo escuchar con fuerza. En 1934 actuó en Radio Stentor y Radio Belgrano. En 1936 en Radio El Mundo y en 1942 en Radio Prieto. Por Radio Stentor protagonizó Pirincho, el hijo del bosque, de José González Castillo, una obra para niños, que representaba su compañía en el Teatro Corrientes.
Realizó exitosas giras por distintos países convirtiéndose en una de las primeras actrices internacionales de Argentina. Actuó en Portugal, España, México, Cuba, Chile y Estados Unidos.
En el último país, tras su actuación en el Manhattan Opera House de Nueva York, escribió el New York Times: “Todos los elogios que se habían hecho de Camila Quiroga no fueron exagerados; en su debut en Nueva York demostró que domina y conoce a fondo todos los modernos secretos escénicos, y que sabe ser superlativa evitando los superlativos, al par que suaviza las durezas de la emoción en un perfecto control de temperamento. Su éxito ha sido triunfal”.

EN PARANÁ

La llegada a Paraná en 1938 fue para estrenar la obra Canadá, del italiano Cesario Giulio Viola traducida por Edmundo Guibourg. EL DIARIO elogiaba el prestigio de la intérprete “que a través de los escenarios más calificados de Europa y ante los públicos más calificados del mundo ha conquistado una nombradía extraordinaria en su arte eximio.” La obra se reiteró en varias funciones y la noche del 8 de julio fue el número central de la velada de gala con la presencia de autoridades provinciales donde se presentó la obra Ya no somos muchachos, de Léopold Marchand.
El elenco que acompañaba a Quiroga estaba integrado por Gerardo Blanco, Daniel Alvarado y Emma Reyles.
Al día siguiente la consagrada actriz entrerriana estrenó la obra Ejemplo de casadas, de Carlos Soldevila.
Esta fue la primera y única visita de Camila Quiroga a Paraná según surge de la necrológica que publicó este matutino en 1948.
Falleció, muy joven y en plena actividad, en Buenos Aires el 28 de febrero de 1948.

Para seguir leyendo y viendo

Una versión reconstruida del filme Juan sin ropa se puede ver en https://www.youtube.com/watch?v=UwHRlcLqxFU

Luis Alberto Salvarezza; Apuntes para un Diccionario de Autores Entrerrianos.

Más temas sobre nuestra región en http://lasolapaentrerriana.blogspot.com/

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