Desde hace doce años en la provincia de Entre Ríos se implementó el programa de Orquestas Infantojuveniles, que permite a niños y adolescentes de sectores vulnerables poder acercarse a la educación musical y a los instrumentos. En Paraná, en la Escuela de la Baxada ensaya la Orquesta Romina Iturain, donde todas las semanas llegan jóvenes que aprenden a leer partituras mientras disfrutan de la música.
En la provincia de Entre Ríos, niños y adolescentes de sectores carenciados pueden acercarse a la música, aprender a tocar un instrumento y acercarse a la educación académica, gracias al programa de Orquestas Infantojuveniles que se implementó en 2012.
En Paraná, chicos y jóvenes concurren los ensayos de las orquestas en distintas escuelas de la capital provincial. En calle Larramendi, en la Escuela de la Baxada del Paraná, los miércoles por la tarde la música resuena. Es que allí se reúnen los integrantes de la Orquesta Romina Iturain, que tiene entre sus docentes a Brisa Montero. La joven que dialogó con BIEN! llegó al programa cuando era una niña y aprendió a tocar el violonchelo, ese instrumento de cuerdas la cautivó y la música le cambió la vida. “La música me rescató de un montón de cosas, es algo maravilloso”, dijo la profesora.
—¿Quiénes participan de las Orquestas?
—Principalmente, niños y adolescentes, en su mayoría provenientes de barrios cercanos a las escuelas e instituciones que participan en el programa. Aunque la iniciativa se centra en los barrios con mayores necesidades, también hemos visto que algunos chicos de otras localidades, como Colonia Avellaneda, se trasladan para participar.
—¿Cuál es la importancia del programa para estos jóvenes?
—El programa ofrece a los chicos de barrios vulnerables la oportunidad de acercarse a la música y aprender a tocar instrumentos. Personalmente, viví en un barrio muy bajo y, cuando comencé en la orquesta en 2012, el acceso a recursos y oportunidades era limitado. Entonces, el programa me cambió la vida, dándome la posibilidad de evitar los estigmas sociales y brindarme nuevas oportunidades. Hoy, soy docente y veo cómo este programa también puede transformar la vida de otros jóvenes, mostrándoles que no necesariamente tienen que seguir los caminos tradicionales esperados en sus contextos.
—¿Cómo fue tu experiencia al comenzar en la orquesta?
—Empecé a los doce años, cuando la orquesta comenzó en julio de 2012. Inicialmente, me asignaron el chelo porque ya había muchos violinistas. Al principio, no estaba entusiasmada con el chelo, pero con el tiempo me fui enamorando del instrumento. A pesar de los desafíos y de tener que combinar la música con la escuela, el programa me permitió avanzar y me brindó oportunidades que nunca imaginé.
—¿Qué fue lo que te acercó a la orquesta cuando eras una niña? ¿Te gustaba la música?
—En mi familia no estaba presente la música. No sé, me acerqué, me gustó poder compartir con otros gurises. Todo esto además me llevó a conocer los mejores lugares de la Argentina con la música. Yo creo que el viajar, conocer distintas personas, culturas y demás, te va formando como persona y te permite ver las cosas de otra manera.
—¿Cuándo comenzaste como docente?
—En 2019, tuve la oportunidad de comenzar a trabajar como docente en la orquesta, justo cuando estaba embarazada. Mi hijo también está interesado en la música, aunque por ahora no está involucrado. Esta transición fue significativa para mí, ya que cuando empecé, no creía que la música podría ser una carrera viable. Sin embargo, el programa me dio una base sólida y la posibilidad de crecer profesionalmente. Me alejó del consumo y de una vida que podría haber sido muy diferente. Y me permitió construir una carrera en la música.
—¿Qué papel juega la música en la vida de los jóvenes de barrios vulnerables?
—La música juega un rol crucial, ya que proporciona una salida y una forma de expresión para los jóvenes. En los barrios, donde las oportunidades pueden ser limitadas, la música ofrece una vía para desarrollar habilidades, autoestima y una perspectiva diferente sobre el futuro. La formación musical también les permite conocer distintas culturas y experiencias, y esto los enriquece como personas y les abre nuevas posibilidades.
La orquesta, en sociedad
Las Orquestas Infantiles y Juveniles participan de actos escolares y tienen distintas presentaciones en la ciudad, como así también en encuentros provinciales y nacionales. “Es fundamental que se den las presentaciones. Los chicos no solo aprenden música, sino que también se presentan en eventos y conciertos, lo que les permite interactuar con la comunidad y mostrar sus logros. Esto les ayuda a ganar confianza y a ver el impacto positivo de su esfuerzo. La interacción con la comunidad también desafía las percepciones de que la música es algo reservado para ciertos contextos sociales”, remarcó Montero.
—¿Qué beneficios notás en los chicos que participan del programa?
—Los beneficios son numerosos. Primero, aprenden habilidades musicales valiosas y desarrollan una disciplina que les sirve en otros aspectos de sus vidas. Además, tienen la oportunidad de conocer distintos lugares y culturas, lo que enriquece su perspectiva. La música les da una forma de escape y un propósito, alejándolos de situaciones potencialmente perjudiciales. En resumen, la música ofrece una alternativa positiva y transformadora.
—¿Qué le dirías a los chicos que están indecisos para que se unan a las orquestas?
—Les diría que se acerquen y prueben. El programa es una excelente oportunidad para explorar la música y descubrir nuevos intereses. No importa si no tienen experiencia previa, aquí se les dará el apoyo necesario para aprender y desarrollarse. La música tiene el poder de cambiar vidas, como lo ha hecho con la mía, y siempre hay algo que puede resonar con cada persona.
Protagonistas
Sebastián Nicolini es uno de los integrantes de la Orquesta Romina Iturain, y dijo a BIEN!: “Mi hermano me incentivó a unirme, él ya tocaba ahí. La orquesta ha sido fundamental para mi desarrollo. Comencé a los nueve años tocando la flauta y, con el tiempo, encontré mi pasión por el violín. Me ha dado una formación musical completa y me ha permitido formar parte de una comunidad de músicos que comparten mi interés. Esto me brindó la posibilidad de aprender y crecer como músico. Me siento muy feliz al ver el entusiasmo de mis compañeros y compartir esta pasión por la música, es increíble. Me gustaría continuar desarrollándome como músico y en el futuro poder enseñar en la orquesta para ayudar a otros jóvenes como yo. La orquesta es una oportunidad maravillosa para crecer, aprender y formar parte de algo especial.
En tanto, desde la puerta del aula de ensayos, Araceli escucha con atención cómo suena la orquesta. Es la mamá de tres niños, Joselyn (16), Gianna (11) y David (7), quienes viajan todas las semanas desde Colonia Avellaneda para integrar la banda. “Es muy importante para ellos la música, es todo. Los chicos aman la música, es vida. Para mí es una satisfacción muy grande que ellos inviertan tiempo en la música”.
Agradecimientos
Para finalizar, Brisa destacó: “Quiero expresar mi profunda gratitud a la Secretaría de Cultura de la Provincia por brindarme esta oportunidad. Gracias a su apoyo, he podido formarme y trabajar como docente. Este programa no solo ha impactado en mi vida, sino que también está haciendo una diferencia en la vida de muchos jóvenes. Estoy muy agradecida por el apoyo y por la posibilidad de contribuir a este proyecto que tanto valoro”.
Música para todos
En la provincia de Entre Ríos desde el 2012 se desarrollan diferentes agrupaciones musicales. Actualmente, se trabaja en cinco orquestas, dos ensambles, una banda y tres coros infantiles y juveniles que dependen de la Coordinación General de Orquestas y Bandas Infantiles y Juveniles de la Secretaría de Cultura de la Provincia de Entre Ríos. Los mismos se llevan a cabo en Paraná, Concordia, Concepción del Uruguay, San José y Gualeguaychú.
Este programa de orquestas y coros está dirigido a niños, niñas y jóvenes que asisten a escuelas de nivel primario y secundario, de modalidad común e integral, ubicadas en zonas en situación de desigualdad social de la provincia.
La participación en las orquestas brinda la posibilidad de cursar la tecnicatura en instrumentos en la Escuela de Música, Danza y Teatro Prof. Constancio Carminio dependiente de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader). A los participantes se les reconoce el primer año de cursada en las orquestas, homologando de ese modo el trayecto curricular y alentando la integración a un proceso educativo valorado y reconocido socialmente. Además, estudian instrumento en la Escuela de Arte en Música dependiente del Consejo General de Educación.
Para sumarse en Paraná
En Paraná funcionan la Orquesta Cunumi en la Escuela Nº 96 José Manuel Estrada, la Orquesta Romina Iturain en la Esc. Secundaria N°15 de la Baxada del Paraná y Esc. Secundaria N°78 J.C. Esparza y la Orquesta San Agustín en la Esc. N°200 Soldados de Malvinas. Además, los ensambles, Liga de los Pueblos Libres en la Esc.N°188 Dr. Ob. Abel Bazán y Bustos y Esc. N° 28 “Ntra. Sra. de Guadalupe, MitaiKoi en la Esc. N°185 Coronel Álvarez Condarco y Ensamble Toque Minuan en la Esc. N° 190 Obispo Gelabert y Crespo y Comisión Vecinal Los Pinos.
Con respecto a las inscripciones la docente de chelo, Brisa Montero, afirmó a BIEN!: “La inscripción es abierta, y el objetivo es que todos aquellos interesados puedan tener una oportunidad. Además, se hace un esfuerzo por adaptar el programa a las necesidades de cada estudiante, brindando el apoyo necesario para que puedan seguir aprendiendo, incluso si enfrentan dificultades para asistir regularmente a las clases”.
