La transcripción de un artículo publicado en un periódico de la capital entrerriana en 1883, permite visualizar cuáles eran, por entonces, las inquietudes centrales que tenía la dirigencia de una institución señera en la ciudad: la Biblioteca Popular del Paraná.
Griselda De Paoli
Especial para EL DIARIO
Qué bueno poder leer un registro de lo actuado por una institución de nuestra ciudad, más que vigente y valiosa, acerca de cómo funcionaba y se pensaba a sí misma en la búsqueda de cumplir a rajatabla sus objetivos. Resulta fascinante poder aproximarse a un enorme periódico de fines del siglo XIX y encontrar allí las reflexiones de quien presidía la Biblioteca Popular del Paraná por entonces (1883).
En el recorte de memoria que proponemos en este artículo, vemos cómo, claramente, se reflexiona acerca de la relevancia de comunicar lo que se hace, y queda a la vista la valoración de la publicidad de los actos como forma de garantizar el poder seguir haciendo. No pasa desapercibido el interés de mostrar al “pueblo” – al que pertenece la Biblioteca Popular- que existe orden en su administración; que el cambio de conducción no es un quiebre sino una sana alternancia; que es de interés de todos los involucrados mejorar lo que se hace. También porque expone a la mirada pública los esfuerzos realizados y que el primer impulso es desde dentro de las instituciones y que se requiere el apoyo indispensable del “pueblo”, que es el destinatario de las acciones.
Sin dudas, con altibajos, de acuerdo a cada tiempo y circunstancia, la Biblioteca Popular del Paraná es una institución en pie, que se ha adaptado a los tiempos y a las demandas del pueblo y de la realidad presente, que además sigue necesitando el soporte de la gente, como lectores y como socios. El acta que incorporamos como registro -fechada el 8 de junio de 1883- es sin duda una garantía para aquellos que quieran acercarse hoy a la Biblioteca.
TESTIMONIO
“No veníamos, en este reducido artículo, a ocuparnos de la excelencia de las bibliotecas Populares …, pues tal cosa está en la conciencia de todos . … Queremos concretarnos a nuestra Biblioteca, dando a conocer … los progresos realizados por la comisión saliente y los propósitos que animan al nuevo Comité Directivo.” En estos términos comienza el texto que precede al acta a la cual se hace referencia.
El documento precisa luego que “El 24 (de mayo) pasado tuvo lugar la Asamblea General que se lleva a cabo todos los años, en la misma fecha, con el objeto de nombrar nueva comisión y de dar cuenta la saliente del estado del Establecimiento, mejoras introducidas, estado de la Caja, etc.”
“El señor Presidente don Gustavo Ferrari dio a conocer la marcha de la administración pasada. Puso de manifiesto las dificultades con que ha tropezado para la adquisición de nuevas obras, por la escasez de fondos y encareció la conducta observada por los demás miembros de la comisión en obsequio a la Biblioteca.”
Cabe señalar prosigue el texto “que es incuestionable que la administración anterior ha efectuado grandes mejoras en la organización interna y llevado a cabo un progreso de consideración en el hecho de aumentar las obras existentes con 160 volúmenes , haciendo con tal propósito una economía de siete pesos mensuales”.
DESCONTENTO, EQUÍVOCOS, AUTOCRÍTICA
“Sin embargo, muchas personas están descontentas porque dicen que hay poquísimas obras que leer, y creen que las Comisiones tienen en gran parte la culpa. El público tiene y no razón de hablar así. Necesitamos explicarnos.”
“El pueblo está en la creencia que el número de suscriptores es grande, que pagan mensualmente todos, y que, por consiguiente, los fondos de la Biblioteca permiten aumentar, lo menos cada año, las obras que existen. Tal creencia es errónea porque ni hay muchos suscriptores , ni todos pagan con puntualidad.”
“Pero el pueblo no tiene la culpa de esa equivocación, sino las comisiones que jamás publicaron en los periódicos de la localidad nada referente a la Biblioteca, así que el pueblo ignora el estado de dicho establecimiento. Este ha sido un descuido de todas las Comisiones que se han sucedido hasta ahora. Somos de opinión que el Presidente debe confeccionar, cada año, por escrito una memoria de su administración, memoria que debe ser publicada. Hasta el presente solo se ha seguido la práctica de que el Presidente de cuenta oralmente de todo lo hecho. Esta práctica debe ser reemplazada por la que indicamos, que es mucho mejor.”
“Esperamos que la nueva comisión sabrá continuar con celo la obra de mejora y organización comenzada por la comisión saliente. No dudamos que en el período actual se realizarán nuevos progresos pues las personas que forman la Comisión Directiva están justamente reputadas como progresistas y aman la institución.”
“Para conocimiento del público damos sus nombres: Presidente- Sr. Salvador Carbó. Vide.id –Dr.Faustino Parera. Secretario-Sr. Joaquín Argüelles. Tesorero-Sr. Lucilo Giménez. .1er. Vocal-Sr. Domingo Comas. 2do. Vocal-Sr., Cayetano Guani. 3er. vocal- Sr. José Predolini.. 4to.Vocal- Dr.Avelino Guindon. 5to.Vocal-Sr. Ernesto A. Bavio. Suplentes- Sres. D. Gustavo Ferrari -Dr. D. Enrique Carbó- D. Alejandro Carbó- José M. Monzon, Víctor A. Duppuy .
DECISIONES Y MEDIDAS
“En la última sesión de la comisión directiva -prosigue el texto del Acta- se tomaron varias disposiciones muy acertadas, que demuestran el empeño con que empieza en sus funciones. Resolvióse cumplir estrictamente el artículo del Reglamento que dice más o menos: El socio que no abonare tres meses, será borrado de la lista. Se resolvió inutilizar las papeletas atrasadas correspondientes a los años de 1876,77,78,79,80,81 y 82, …”. En tal sentido”se nombró una comisión con este efecto.”
Asimismo “se resolvió que se daría publicidad a todos los actos referentes a la Biblioteca: un estado trimestral de la Caja, publicación quincenal del número de obras leídas en el salón de lectura, autores de las obras y personas que las han leído, obras vendidas, obras regaladas, nuevos periódicos recibidos, nuevos socios, etc., etc. Esta es una excelente medida bajo cualquier punto de vista que se la considere. El pueblo sabrá así todo lo que debe saber.”
“¿Quién, por ejemplo sabe que el actual Presidente es el señor don Salvador Carbó (perdónenos dicho señor si herimos en algo su modestia y generosidad); quien sabe, repetimos, que el señor Carbó ha hecho una donación de 60 volúmenes. Seguramente que no será la única persona que haya hecho donaciones, y, sin embargo, nadie sabe. Todo ello se remedia con la publicación de los datos arriba mencionados.”
En la parte final del acta se indica que: “las personas que deseen hacer donaciones en ese sentido, se servirán mandar las obras a casa del señor Presidente.”
“A más -concluye el documento- se nombró una Comisión compuesta por los señores Guindon, Bavio y Argüelles para que presenten un proyecto tendiente al aumento de fondos de la Biblioteca. Como se ve, la nueva comisión empieza a trabajar fervorosamente y no hay que dudar que el pueblo corresponderá a sus nobles esfuerzos”.
