El ciclo 2024 de Miércoles de Cine, continuará con la proyección de Corsage, producción francesa de 2022, coproducida internacionalmente, escrita y dirigida por Marie Kreutzer. La actividad se desarrollará el próximo miércoles 18 de setiembre desde las 20.45 en el auditorio del Círculo Odontológico.
La protagonista de Corsage es la emperatriz Elizabeth de Austria, a la que el cine popularizó en una trilogía de los 50 con el nombre de Sissi y el rostro angelical de Romy Schneider. No fue ella; sin embargo, su única intérprete: entre otras, también la hizo Ava Gardner en 1968 en Mayerling, que cuenta la historia de la extraña muerte del príncipe heredero Rodolfo. En 1972, Luchino Visconti volvió a convocar a Schneider para el mismo papel en Ludwig, aunque en aquel caso como secundaria. Allí el protagonista era su primo, el “rey loco” de Baviera.
En una de las escenas iniciales de Corsage, y de manera casi explícita, se cita el film de Visconti, que desde luego nada tenía que ver con la melaza romántica de las películas antes mencionadas, a través de los juegos eróticos entre ambos primos —aunque él era homosexual, lo cual discuten en una escena ulterior, después de hacer el amor— y la cabalgata en redondo de Sissi dentro de una caballeriza. Interpretada ahora por la magnífica Vicky Krieps, el film de Kreutzer levanta vuelo propio por muchas razones, pero especialmente por una: su tratamiento del tema del tiempo.
El problema del tiempo es, pues, la médula de esta película, y a él están subordinados, y cobran sentido, los anacronismos, las inexactitudes históricas, las “conductas impropias”.
Sissi está por cumplir 40 años, edad liminar en el siglo XIX: del otro lado está la vejez y el acecho de la sepultura. Su obsesión por la belleza la lleva a imponerse experimentos insoportables, como ese corset (de allí el título del film) que, en algún caso, le provoca desvanecimientos; también se somete a dietas y ejercicios que la exceden. Pero hablar meramente de coquetería sería una frivolidad, y esta película no lo es.
ESCAPAR A LA SOLEMNIDAD
La mayor parte del mundo que rodea a la provocativa emperatriz pertenece a un ambiente que luce como un circo decadente. Y ella –culta, refinada, insólitamente liberal para su tiempo– sobrevive con astucia, pero sin estar exenta de sufrimientos cotidianos.
Lo primero que se nota en esta película ligera y a la vez ambiciosa es la idea fija de escapar a la solemnidad que ha aplastado a innumerables producciones de época. Más de una vez, la pomposidad del contexto contagió a los propios cineastas y nos aburrimos tanto como los monarcas y cortesanos en sus ceremoniosos banquetes. Pero la puesta en escena de Kreutzer escapa a ese peligro. La cadencia suave de la narración está en perfecta sintonía con la prudencia que revela en todo su recorrido para no entregarse a la gravedad. Corsage es una película tan grácil como su protagonista excluyente, interpretada por Vicky Krieps con una soltura que ratifica su enorme talento para la actuación.
Es también una película sobre los secretos, los ocultamientos y los engaños. La emperatriz rebelde que muchos conocieron como Sissi, un apelativo demasiado informal para su estatus, tiene una intimidad cargada de tensiones, una vida interior agitada y otra pública en la que está obligada a fingir. Es una rebelde sin causa que sin embargo no está retratada como una heroína inmaculada. Hay más de una actitud fría y despreciativa de esta mujer sinuosa que Kreutzer pone de manifiesto y también remarca a través del reclamo de dos hijos que intentan ponerla en vereda razonando como exige el mundo al que pertenecen.
TRASCENDENCIA
Hablar de una historia “feminista”, en el típico sentido de la heroína —expresión que adquirirá doble sentido, como sabrán quienes la vean— que se rebela contra un sistema “patriarcal” representado por el emperador Francisco José, sería también subestimar el film. La película de Marie Kreutzer trasciende el lugar común y, además de todo lo antes dicho, añade algunas frases antológicas sobre la lógica del deseo, como off de la protagonista: “Nadie quiere a nadie. Todo el mundo quiere lo que desea del otro y queremos a quien ve en nosotros lo que nos gustaría ser”.
Para el siguiente encuentro se anuncia el filme “4 meses 3 semanas 2 días” (Rumania), filme de Cristian Mungiu, Palma de Oro del Festival de Cannes 2007.
La cita es en el auditorio del Círculo Odontológico (Corrientes 218), a las 20.45, con entrada libre y gratuita. Los organizadores agradecen la colaboración con un alimento no perecedero que se destina al Comedor Merendero Nuestros Niños (Barrio Los Berros).