El próximo 25 de mayo tendrá lugar la IV Edición de la Regata de las 200 Millas del Paraná. La cita, exclusiva para veleros cabinados, unirá la capital entrerriana con San Pedro y se posiciona como la competencia de su tipo, más larga del mundo.
Comenzó a palpitarse con éxito la IV Edición de la Regata de las “200 Millas del Paraná”, que este año se llevará adelante el próximo 25 de mayo, a propósito del feriado largo.
La realización, organizada entre el Club Náutico Paraná (CNP), el Club de Velas Rosario y el Club Náutico San Pedro, fue presentada ayer en el CNP, en un lanzamiento que contó con la presencia del presidente de la entidad, Leonardo Díaz; el presidente de la Subcomisión de Vela, Rubén Farias; del tesorero de la Subcomisión de Vela, Pablo Mayol, y de nautas que serán protagonistas.
La competencia reunirá a un considerable número de embarcaciones de distintas ciudades y prevé llevar adelante el recorrido estipulado entre 24 y 36 horas.
El desafío bienal para los veleros cabinados se trata de una de las regatas sobre agua dulce más larga del mundo y tendrá al majestuoso río Paraná como testigo privilegiado.
Cabe repasar que la exitosa primera edición del 2017 unió el puerto de La Paz (Entre Ríos) con llegada en Rosario. En 2019, el desafío propuesto para las “200 Millas” tuvo el recorrido desde Paraná hasta San Pedro. A aquella realización, se sumó la categoría “100 Millas”, desde Paraná hasta la Ciudad Cuna de la Bandera, derrotero que se repitió en 2021.
BALANCE POSITIVO DE BIELER EN ITALIA. Emilia Bieler, nauta de Optimist del Club Náutico Paraná participó en el “41 Lake Garda Meeting – Fraglia Della VelaRiva 2023”. Del encuentro participaron 1200 competidores, divididos en flotas de oro, plata, bronce, esmeralda y perlas. Esta maravillosa experiencia para la joven se dio previo a su participación en el African Championship a llevarse adelante desde el 2 al 9 de mayo en M´diq (Marruecos).
Sobre su experiencia en Italia, la santafesina comentó: “Los vientos cambiaban dependiendo los horarios, lo que hacía una cancha única y diferente a todas en las que me ha tocado navegar. El agua casi transparente, una profundidad e inmensidad tan singular como sorprendente. Fue un desafío ya que tampoco estaba con mis compañeros de Club, pero si bien conocía a muchos de mis compañeros de viaje, pero durante el mismo nos fuimos conociendo y nos volvimos un grupo muy unido”.
Además agregó que las condiciones fueron muy exigentes. “Los vientos eran realmente muy fuertes por momentos y el frío se hacía muy intenso. El segundo día de competencia ya se dividían las flotas. Quedé en flota de bronce desde ese día y finalicé en el puesto 20”, concluyó.
