Cientos de personas se autoconvocaron a 8 años de la primera movilización contra la violencia machista. En Paraná, la marcha comenzó a las 17 en Plaza 1° de Mayo y finalizó en Plaza Mansilla. En nuestro país, cada 29 horas es asesinada una mujer. Entre los motivos de la marcha, se destacó el pedido de justicia por Julieta Riera.
Desde hace ocho años, el país se moviliza cada 3 de junio bajo la consigna “ni una menos”. Con el transcurso del tiempo, se convirtió en un hito del movimiento por los derechos de las mujeres y las disidencias, donde salen a las calles para visibilizar las situaciones de violencia cotidiana que se vivencian en los hogares y en los espacios de trabajo. Tal como se reitera en cada movilización, éstas son pequeñas alertas que pueden culminar en un femicidio, una muerte de una mujer por el solo hecho de serlo.
Según el Observatorio Mujeres, Disidencias y Derechos (Mu.Ma.La.) en lo que va del año, en Entre Ríos se cometieron 4 femicidios (María de los Angeles Dayer, Valeria Leoncino, M N V, y Mónica Truzskot); 8 intentos de femicidios y 1 intento de trans travesticidio. En tanto, a nivel nacional se cometieron 122 femicidios en lo que va de 2023.
En nuestro país, cada 29 horas es asesinada una mujer. Por este motivo, cientos de personas se movilizaron por las calles céntricas de Paraná en la tarde de ayer.
“Estoy muy consternada y triste con la noticia”, expresó Ana Brugo, madre de Julieta Riera. Foto: Gustavo Cabral.
“La movilización de estos años nos ha permitido visibilizar violencias que antes estaban naturalizadas, defender nuestros derechos y construir herramientas para hacerlos efectivos. Nos permitió unirnos en el dolor y fortalecernos en la lucha, caminar juntas priorizando las necesidades y no las diferencias”, destacaron las integrantes de la Multisectorial de Mujeres Entrerrianas y la Asamblea de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans y No Binaries (MLTTNB) en el documento leído al finalizar la marcha.
El lema de este año fue Unidas contra la derecha. En declaraciones a EL DIARIO, Loreley Farina, integrante de Mumalá y parte de la organización, explicó: “la política en este momento está bastante dividida, hay una extrema derecha que está intentando anular muchas conquistas de las mujeres y de los derechos humanos, no podemos estar ajenas a ese contexto porque nos toca de lleno a nuestra cotidianidad. Este reclamo es para que los candidatos puedan decir lo que están pensando en política de género, no queremos este retroceso enorme, pensar en no denunciarlo sería atroz. Sin decisión política no hay ni una menos y que debemos estar unidas.”
MOTIVOS
La plaza se colmó de mujeres pidiendo justicia. Personas mayores, adolescentes, jóvenes y niñas pusieron el cuerpo a un mismo reclamo: ni una menos, vivas, libres y con derechos nos queremos.
Entre los motivos, las presentes destacaban la falta de reglamentación de la Ley Micaela, para capacitar a los trabajadores del Estado en materia de género: “no puede ser que vayamos a denunciar y los policías no nos crean”, explicó Lorena, cocinera de un merendero comunitario. Además, se pidió por la reglamentación de la ley de Educación Sexual Integral, el cese de la precarización laboral que vulnera los derechos de miles de mujeres, el acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo y la declaración en emergencia en violencia contra las mujeres. La capacitación en perspectiva de género para los trabajadores de los medios de comunicación fue una de los ejes mencionados en el documento redactado por las organizaciones de la movilización, por considerarlo una herramienta fundamental para erradicar la violencia simbólica y psicológica.
Del mismo modo, se solicitó el efectivo cumplimiento del protocolo ante abuso sexual a mujeres y disidencias en los Hospitales y Centros de Salud.
JUSTICIA POR JULIETA
Asimismo, fue notoria la exigencia de la perspectiva de género en las resoluciones y el pedido de justicia por las víctimas de femicidio. En este sentido, se solicitó que la justicia obligue a los organismos del Poder Ejecutivo a proteger a las víctimas y no aislarlas. Fue contundente el pedido de justicia por la joven Julieta Riera, ante la reciente decisión del Superior Tribunal de Justicia de anular el debate del jurado popular y disponer la realización de un nuevo juicio. Julián Christe había sido condenado a perpetua por el femicidio cometido en el año 2020.
Durante el transcurso de la marcha, el cántico que resonó con más fuerza fue “Christe femicida, a los asesinos los cuida la policía y la justicia”. Cerca de las 18, las diferentes organizaciones sociales y personas autoconvocadas llegaron a Plaza Mansilla, ante la explanada de Casa de Gobierno, donde se leyó el documento con los principales reclamos del movimiento de mujeres hacia el Estado.
Luego de ello, Ana Brugo, madre de Julieta, tomó la palabra. La multitud, que antes acompañaba con tambores y cantos, se enmudeció para darle lugar y respeto.
Con emoción, Ana expresó: “Estoy muy consternada y triste con la noticia. Es de no creer que un juzgado haya condenado al que mató a mi hija y ahora pueda quedar en libertad”. Brugo remarcó, ante las presentes: “ella no se tiró, la tiraron. Estos son golpes muy duros. La fuerza me la dan todas ustedes que están acá, que con empatía entienden lo que una mamá está pidiendo y está pasando, las hermanas, los tíos, las primas, Así como Julieta, siempre digo que es una utopía decir que nunca más habrá femicidios, pero vamos a tratar de que no haya ni una muerta más”.
Como acto de homenaje y pedido de justicia, decenas de mujeres cruzaron en silencio la calle, hacia Tribunales, y dejaron en su ingreso carteles alusivos al caso que conmociona a la sociedad paranaense.
