Según señalaron fuentes vinculadas a la investigación, fueron fundamentales las imágenes de las cámaras de seguridad y la profundización de una pista que se robusteció en las últimas horas.
De acuerdo a lo que pudo averiguar Diario Río Uruguay con fuentes vinculadas a la investigación, el hallazgo de los restos que, todo hace presumir serían de Luisina, fueron posible gracias a que se profundizó una de las pistas que se investigaba en la causa.
Luego de los peritajes realizados en la zona del cañaveral de Rívoli, puente Alvear y el barrio Benito Legerén, en las últimas 48 hs. la lupa se posó en un automóvil que aparecía en varios de los videos en lo que se analizaban los movimientos motociclísticos del imputado Horacio “Ñoño” Benitez.
La sospecha se profundizó cuando se confirmó que ese vehículo -presuntamente un Volkswagen Gol- era propiedad de un hermano de Benitez y que el conductor en esos movimientos podría ser el propio acusado.
Es así que comenzaron a revisarse las grabaciones de varias cámaras de seguridad, para determinar los recorridos de ese automóvil. Este trabajo de varios días, llevado a cabo por personal de las divisiones Investigaciones y Criminalística (de la Jefatura Departamental Concordia) terminó estableciendo que, en el mismo día en que Luisina ingresaba en moto a la casa de Benitez, horas después, este auto haría su primer recorrido hasta la zona de Pampa Soler.
Con esa pista robustecida, en la misma tarde de este pasado sábado se comenzó con un primer rastrillaje, el cual terminó sin novedad con la caída del sol. Pero la búsqueda se retomó este domingo, hasta que en las primeras horas de la tarde se dio con las partes de un cuerpo femenino, que, todo hace presumir, sería de Luisina Leoncino.
Además del hallazgo concretado en la zona de Pampa Soler, la Justicia ordenó el secuestro y resguardo del mencionado auto, el cual comenzará a ser peritado este lunes.