El Ministerio de Economía anunció medidas para el sector -que implican una inversión del Estado de más de $10.000 millones- durante un encuentro con representantes de la cadena lechera en la provincia de Santa Fe.
El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció ayer una suspensión de las retenciones por 90 días para los productos lácteos, el aumento de 20% en la cuota de Impulso Tambero y la extensión del programa hasta el 31 de diciembre, a cambio de congelar los precios de los productos por tres meses y mantener la rentabilidad de los tamberos.
Las medidas fueron dispuestas por el también candidato a presidente por Unión por la Patria (UxP) tras una reunión que, junto al secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo, mantuvo con representantes de la cadena lechera y funcionarios de las provincias productoras en las instalaciones de la empresa láctea Tremblay en la localidad santafesina de Pilar.
“El tema de los precios y de que tengamos acordado un sendero de precios claros para la gente en los próximos 90 días en las góndolas es clave y es clave también que el esfuerzo llegue al productor, porque si bajamos retenciones y el productor no ve una mejora en el precio no habrá servido nada en términos de volúmenes”, aseguró.
Por eso, el titular de la cartera agropecuaria remarcó que “el primer compromiso es que el precio del derrame llegue a los productores y el segundo es que el precio de la góndola se nos quede quieto en los próximos 90 días, para que cuando la gente vaya a comprar, se encuentre con los mismos precios. Tienen que haber un compromiso de punta a punta de la cadena”.
DETALLES. El programa de Impulso Tambero -que va por su segunda edición y se implementó con el objetivo de compensar las subas en los costos de producción del sector a raíz de la puesta en marcha de sucesivos Programas de Incremento Exportador (PIE), que encareció, entre otros aspectos, el costo de los alimentos de los animales-, Massa anunció un aumento en la cuota de 20% y la extensión de la iniciativa hasta finales de año.
La edición vigente destina $20 por litro para aquellos productores que no superen el promedio de 1.500 litros diarios y $15 por litro para los que producen entre 1.500 y 7.000 litros diarios, con un tope de $800 mil por mes.
Este paquete de medidas “nos lleva de aquí a fin de año una inversión de más de $10.000l millones para el sector, $7.200 millones menos de ingreso para el Estado en términos de derechos de exportación y $3.573 millones puestos como inversión del Estado para sostener funcionando y produciendo nuestros tambos”.
MÁS DECLARACIONES. Por otro lado, Massa convocó a la cadena láctea a elaborar un plan para el sector a partir del 10 de diciembre. “La leche y sus derivados son claves en la canasta básica, pero también son claves en la producción de proteínas para vender al mundo y ocupar más mercado para generar dólares para la Argentina; hoy estamos en una transición por el contexto electoral y porque están en emergencia; el 10 de diciembre sentémonos a planificar los próximos cuatro años del sector”, concluyó.
Por su parte, Bahillo destacó la vocación de diálogo de Massa al acercarse a dialogar con los actores de la cadena láctea y reafirmó “el compromiso de continuar acompañando a los productores porque los problemas no se solucionan con la primera lluvia”.
Y el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, sostuvo que “es una oportunidad para ratificar el potencial que tiene la lechería y la región centro por el arraigo, la incorporación de valor y la distribución en cada uno de los distintos pueblos, generando industrias, con la trascendencia y la historia que la lechería santafesina tiene llegando a los mercados internacionales”.
Mensaje de alerta
Durante la semana, asociaciones de productores y cámaras industriales del sector enviaron una misiva a Massa y Bahillo alertando sobre la situación de la actividad, que “pierde por mes $5.700 millones” y pidieron una seria de medidas, como la quita de retenciones, el establecimiento de una suerte de programa símil al “dólar soja” pero para los lácteos, acelerar el pago del Impulso Tambero y modificar el precio de referencia de aduana hasta adecuarlo con los valores internacionales.