Las empresas presentaron el procedimiento preventivo de crisis. Buses Paraná hizo la presentación el viernes y ahora se aguarda que se fije una fecha de audiencia entre las partes para abordar la situación.
ERSA y Mariano Moreno, firmas que integran Buses Paraná, indicaron que “con el fin de mantener los puestos de trabajo afectados al servicio público de transporte urbano de pasajeros de ómnibus de la ciudad de Paraná, se proponen implementar una serie de medidas”.
En ese sentido, mencionan: “La suspensión del 33% del personal de conducción, con el pago del 50% del salario básico según escala del mes de octubre del 2023, en los términos de los artículos 218, 219, 221 y 223 bis de la Ley de Contrato de Trabajo, por el término de 120 días o hasta tanto se resuelva y reestablezca la ecuación económica de la empresa. La suspensión se aplicará de modo rotativo al personal afectado, de modo tal de equilibrar el impacto de dicha medida. La rotación propuesta será de 30 días”.
HABERES CONGELADOS
Se propone también “congelamiento de los salarios de los trabajadores no suspendidos, conforme a la escala del mes de octubre de 2023, que surgen de las paritarias de fecha 01/11/2023”.
“El pago de la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario se abonaría en tres cuotas iguales y consecutivas el 10 de enero, el 10 de febrero y el 10 de marzo de 2024”, plantean.
Además, proponen “el pago como asignación no remunerativa en los términos del artículo 223 bis de la LCT del 90% de los salarios que se abonen al personal suspendido”.
En ese sentido, aclararon que “la Secretaría de Trabajo de la provincia solo recepciona la solicitud, da curso e interviene Ministerio de Capital Humano de la Nación”, que debe fijar fecha de audiencia entre las partes.
Viene al caso recordar que las dos firmas que conforman Buses Paraná -Transporte Mariano Moreno SRL y Ersa Urbano SA- desde 2018 tienen la concesión del servicio de transporte urbano de pasajeros en la capital provincial.
INCUMPLIMIENTOS
Las empresas de colectivos argumentan que “estas medidas resultan necesarias e imprescindibles para que la firma adapte la prestación de los servicios y su estructura de personal a la situación descripta, ocasionada por los reiterados incumplimientos de la Municipalidad de Paraná y ha sido proyectada con la finalidad de afectar a la menor cantidad de trabajadores posible, conscientes del impacto social que lo hasta aquí expuesto implica, pero teniendo en miras también el sostenimiento del total de puestos de trabajo”, dice el escrito de la concesionaria.
La presentación fue hecha el 15 de diciembre, cuenta de 32 páginas y está firmada por Marcelo Lischet, socio gerente de Transporte Mariano Moreno SRL; y por el lado de Ersa Urbano firmó la apoderada legal Daniela Brumatti.
Para que pueda prosperar ese plan, la prestataria solicitó a la Secretaría de Trabajo que cite a la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el sindicato de los choferes, y rubrique esa propuesta.
La petición se da en un marco de resentimiento del servicio de transporte de pasajeros en Paraná. Desde el martes 28 de noviembre, la concesionaria suspendió unilateralmente el servicio nocturno, entre las 21,30 y las 5,30, y aún cuando desde la Municipalidad de Paraná se reprochó la medida y se anunció la aplicación de multas, el recorte se mantiene todavía.
Mientras, se está al aguardo que impacte en el sistema el aumento de la tarifa del 74% aprobado por el Concejo Deliberante: el boleto pasará así de $117,20 a $204.
Qué argumentan las empresas
“La empresa de Transporte Mariano Moreno SRL, a lo largo de su historia no fue ajena a la realidad y de los vaivenes que ha sufrido la economía nacional. Sin embargo y en el último año anterior, el fuerte deterioro de la economía y de eliminación de los subsidios nacionales encontró a la empresa en el medio de la más importante inversión privada del sector de los últimos tiempos, producto de los compromisos asumidos en el proceso licitatorio llevado adelante durante el año 2017,”, dice, según el documento al que accedió PlazaWeb.
Y agregan: “Bajo las condiciones del proceso licitatorio, la empresa resultó adjudicataria de las línea del grupo Nª 2 (líneas 2/ 7/8/9/16/Ns), debiendo cumplir con el compromiso de renovación del parque móvil y de la adquisición de nueva tecnología, incorporando unidades 0 km al sistema a partir del año 2018, haciéndose cargo desde entonces de la compra de chasis, carrocerías e insumos valuados en dólares estadounidenses y asumiendo un costo financiero sin precedentes en la actividad”.
Tras recordar que la empresa realizó varios reclamos para actualizar la tarifa, señalan que la falta de respuestas provocaron “un notorio desfasaje operacional durante los años 2019 y 2020, que llevaron a la empresa a iniciar los reclamos administrativos respectivos”.
“Resulta necesario se considere en esta instancia, las circunstancias nacionales que contribuyeron a la generación de crisis de la actividad en la jurisdicción, producto de los acuerdos entre Nación y Provincia, en el marco del Pacto Fiscal de mediados de 2018, que modificaron las condiciones de ingresos de las empresas provenientes de los subsidios nacionales al sistema, trasladándose la responsabilidad a los gobiernos locales”, recuerdan luego. Enseguida, mencionan eliminación de subsidios a partir de enero de 2019.
