Quien canta, reza dos veces, señala una frase. También cantar es una vía para alejar la tristeza y la desazón, y conducir a las
personas a un espacio reflexivo de encuentro con su interior. El canto lleva a compartir emociones que fluyen con la voz como
instrumento privilegiado. Conjugando esas dimensiones con otras ligadas a la celebración religiosa, la Misa Criolla es una
manifestación de aspectos trascendentes y refleja el sentimiento popular. Eso se confirmó con la presencia masiva de público
al concierto en la Catedral Metropolitana de Paraná, con la participación de un ensamble coral-instrumental organizado
desde el Área de Cultura del Rectorado de la UADER.