Boca Juniors le ganó 3 a 2 a River Plate en el duelo correspondiente a los Cuartos de Final de la Copa de la Liga 2024. En el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba, que contó con ambas hinchadas, se vivió una verdadera fiesta y un superclásico con alto nivel de juego. El Millo empezó ganando, el Xeneize lo dio vuelta y supo aguantar hasta el final.
Cinco goles tuvo el clásico entre los dos equipos más grandes del fútbol argentino. Y el resultado fue fiel al trámite del partido. Dos conjuntos que vienen valentonados a nivel internacional, tuvieron que enfocarse en el plano nacional en otro mata a mata.
Esta vez, el condimento especial fue la presencia de ambas hinchadas. Y frente a ello, los equipos no defraudaron y proporcionaron un espectáculo digno de lo que significan históricamente.
El Millo golpeó primero, luego Boca parecía haber dado el nocaut pero River terminó decorando el marcador y haciendo justicia del duelo entre dos rivales que no mezquinaron nada.
MINUTO A MINUTO. Lejos de tener un dominante, el encuentro se vio de ida y vuelta en el arranque, profundizado además por los pases imprecisos en la mitad del campo. Sin embargo, ambos equipos fueron creciendo y animándose a medida que transcurría el reloj.
River en el ataque fue pesado con el tridente Colidio, Borja y Echeverri, que fue el puente entre el medio campo y los delanteros.
A los 9 minutos del encuentro, nace una jugada desde el arco de Franco Armani, que termina conduciendo y siendo vital el juvenil de 18 años, Claudio Echeverri. Por la derecha, acompañó toda la jugada el colombiano Miguel Ángel Borja, que no perdonó y puso el 1 a 0 para el Millonario.
El más determinante de la temporada, que estuvo en duda hasta las últimas horas debido a su recuperación muscular, fue el que abrió el marcador y a su vez, infló su cuota goleadora, convirtiéndose en el único goleador de la temporada, con sus 13 gritos.
Después del tanto, la sinfonía de River predominó por al menos diez minutos.
Lejos de dejarse estar, Boca no se dio por vencido y lentamente comenzó a dominar los hilos del partido. Con Zenón, Saralegui, Cavani y las subidas de Blanco, el Xeneize llevó peligro al arco custodiado por Armani.
El trámite del partido se volvió por tandas bastante repetitivo. Cada equipo sacó a relucir sus figuras, que son piezas importantes dentro del equipo fecha tras fecha, sobre todo de la mitad de campo hacia adelante y por supuesto, contando con las murallas que suelen ser ambos arqueros.
El Xeneize apostó por el juego colectivo, y de tanto buscar, encontró. El contador azul y amarillo lo abrió Merentiel a los 46 minutos. Desde el costado derecho, el peruano Advíncula llegó hasta el fondo para que en el área chica, alcance a pellizcar en soledad la Bestia, que encontró a Armani volviendo de la custodia del primer palo y sin más incidencias, empató el partido antes del descanso. Para el desarrollo del partido, el empate fue más que justo.
EL COMPLEMENTO. Sin modificaciones en ninguno de ambos once, saltaron al complemento en búsqueda del pasaje hacia semifinales. Apenas dos minutos de la segunda mitad y ya el encuentro presentó incidencias. El constante duelo entre Rojo y Borja, terminó por amarillas para ambos y desató un tumulto. Yael Falcón Peréz intentó apaciguar el tenso momento mostrando la cartulina, pero propio de las emociones que genera el Superclásico, la pica continuó.
A los seis minutos, llegó una jugada polémica. River en ataque, baja una pelota de cabeza con Enzo Díaz en un remate que rechaza Pol Fernández, termina pegando en Cristian Lema y se direccionó al arco. Sergio Romero la sacó sobre la línea. El árbitro cobró en principio gol, pero el VAR determinó que no entró en su totalidad.
Boca, inflado por el momento, se acercó al área rival. Como respuesta al envión del conjunto de La Ribera, Demichelis metió cambios, metiendo en el campo a Lanzini y Barco. En su lugar, salieron Echeverri, de gran partido, y Nacho Fernández, ambos amonestados.
Sin embargo, un mal despeje de Herrera terminó recuperando Boca. El centro fue hacia el área chica, donde perdió la dividida Enzo Díaz ante el Matador. Cavani la bajó con calidad y a los 16 minutos puso el 2 a 1.
Desde ahí, Boca fue superior. En una ráfaga fugaz, el Xeneize puso el 3 a 1. A los 22 minutos, el delantero uruguayo disparó al arco, Armani salió pero el rebote fue capturado por Merentiel, que se metió ya intuyendo la posibilidad de una segunda jugada.
Los minutos venideros a los goles, River se vio superado ampliamente. Al equipo de Demichelis le costó proyectar su juego por no ser el dominador de la pelota. Buscó el descuento, sin embargo el minutero siguió corriendo sin que eso suceda pronto.
Los cambios propuestos por ambos entrenadores, le dieron un poco de respiro al encuentro que dejó de ir constantemente de arco a arco.
Sobre el final, River fue un poco más pero no pudo torcer la partida ante un Boca, que esta vez jugó efectivamente desde lo colectivo y no perdonó al momento de facturar con los puntos más altos del encuentro, Cavani y Merentiel.
Un capítulo aparte para el arquero xeneize, artífice importante del triunfo sacando varios remates cerca del pitazo final.
En el tiempo agregado, River buscó y buscó hasta encontrar pero fue demasiado tarde. Paulo Díaz fue el que en dos oportunidades, intentó ante un Romero que se vio vencido en la segunda. El defensor chileno terminó decorando el 3 a 2 a los 95 minutos.