La provincia cuenta con un espacio preparado especialmente para mantener las condiciones de seguridad, la conservación y la distribución de las vacunas, garantizando un derecho fundamental en toda la provincia. La Cámara de Vacunas es parte de un sistema centrado en la prevención.
Las vacunas constituyen uno de los avances más importantes en materia de salud a nivel mundial, y son el método más seguro que hay para proteger a la población de potenciales enfermedades. Pero para que sean realmente eficaces, es fundamental asegurar en todo momento la potencia inmunológica de estos productos biológicos sensibles a la temperatura.
De allí que los protocolos para su recepción, almacenamiento y distribución están absolutamente vinculados al mantenimiento de la cadena de frío y al cumplimiento de normativas específicas.
Desde el año 2023 la provincia cuenta con su propia Cámara de Almacenamiento, un edificio nuevo emplazado en calle Ambrosetti de la ciudad de Paraná -en el predio del Hospital Escuela de Salud Mental- que tiene una superficie cubierta de 254 metros cuadrados, un poco más de 62 metros cuadrados semicubiertos y 561 en áreas exteriores, que permite el fácil acceso.
Allí las vacunas son almacenadas a una temperatura que va de 2º a 8º C (el rango indicado para la conservación y el transporte de las 18 vacunas incluidas en el Calendario Nacional), por lo cual los operarios disponen de camperonespara trabajar abrigados mientras se encuentran adentro de la Cámara.
Asimismo, es importante saber que por fuera de las dosis del Calendario Nacional hay vacunas que necesitan temperaturas de conservación específicas que requieren de equipos especiales. Ejemplos de esto son las vacunas contra el Coronavirus de los laboratorios Pfizer (que debe ser conservada en ultrafreezer a -80º C) y Moderna (que necesita mantenerse a -24º C, en freezer), y este Depósito tiene la capacidad técnica para satisfacer tales requisitos.
A la fecha, entre las vacunas del Calendario Nacional y contra el Coronavirus, hay 530.480 dosis almacenadas; mientras que la capacidad total de la cámara asciende a 650.000 dosis (sujeta a las medidas de embalaje de las vacunas).
Beneficios de este espacio
La nueva estructurase planificó para centralizar en un solo lugar el manejo de este tipo de insumos, garantizando el cumplimiento de las pautas de seguridad y simplificando la logística.
Cabe recordar que, anteriormente, parte del equipo administrativo del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) trabajaba desde las oficinas centrales del Ministerio de Salud de Entre Ríos (ubicadas a media cuadra de la plaza principal de Paraná, con el tránsito que implica), mientras que el equipo técnico estaba en la Cámara de Vacunas que funcionaba debajo del edificio de Vialidad Provincial (a más de diez cuadras de las dependencias administrativas, en otra zona con importante flujo vehicular).
Por lo tanto, la construcción de este ámbito específico, que cuenta con un playón y oficinas propios, ha permitido mejorar la logística en relación al recibimiento y expedición de vacunas, agilizar y facilitar la entrega.
En esta línea, el jefe del PAI, Claudio Niz, destacó la importancia de que la provincia cuente con este ámbito, ya que se garantizan las condiciones técnicas, ambientales y de procesos administrativos, y optimiza el mantenimiento de la cadena de frío para las vacunas y el almacenamiento de descartables. “Contar con una Cámara nos permite sostener las pautas de seguridad hacia los distintos efectores de salud como garantía para que ese recurso tan valioso sea de buena calidad”.
“Este espacio tiene capacidad para almacenar el recurso de las vacunas para toda la provincia, que se gestiona a través de la adhesión a los programas de enfermedades inmunoprevenibles de Salud de la Nación y se articula en la provincia” explicó Niz y añadió que “esto permite tener las dosis y mantener el control sobre el stock disponible, para garantizar luego la distribución y la llegada a término y a tiempo de esos insumos a los hospitales y centros de salud”.
“Todos los años se hace una planificación en base a los datos poblacionales, y la cantidad de bebés nacidos vivos, para estimar la cantidad de vacunas que la provincia va a requerir para el año siguiente”, sostuvo Niz. Además, aseguró: “Es muy importante que la provincia y el Ministerio de Salud tengan una cámara propia porque garantiza tener esos recursos más al alcance de los servicios de salud”.
El jefe del PAI provincial remarcó la importancia de la fuerte articulación que mantiene el Ministerio de Salud de la Nación con las distintas jurisdicciones del país, incluida Entre Ríos, lo que da lugar a un sistema interinstitucional en el que interviene tanto el personal sanitario como el personal logístico y técnico, con las solicitudes de vacunas hacia la cartera nacional y, sucesivamente, hacia los distintos niveles de los efectores de salud.
“Estamos siempre en coordinación con todo el sistema, también con el Registro Federal de Vacunación Nominalizado –Nomivac- que es el registro único de todos los tipos de vacunas, tanto que entrega el PAI, como también de aquellas que son compradas por las distintas jurisdicciones” explicó Niz.
En este circuito, remarcó los detalles del procedimiento, que se extiende desde la entrega en el laboratorio productor -por vía terrestre, marítima o aérea- y donde en todo el recorrido los materiales siempre son conservados a la temperatura correspondiente.